Como en el taller de Gepeto, en Santa Fe hay un rincón donde la magia resplandece y le da vida a los muñecos. Es que, en Moreno 2441, un grupo de personas recrea mundos de títeres para grandes y chicos. El hechizo no es ocasional, el teatro de títeres El Retablo de las Maravillas lleva más de 27 años dando vida a los títeres y representa el mundo con pequeños personajes. En los últimos años, crearon las obras "Mano de fuego"; "Pequeñas historias" y "Nubosa N° 3", y este sábado, a las 17.30, abrirán la puerta a una historia "De amores, diablos y flores", que se presentará todos los sábados de agosto, con igual hora y lugar.

Cristina Pepe, integrante de El Retablo de las Maravillas, explicó que éste es un espectáculo para niños pensado para toda la familia porque "así como el chico hará su lectura, el adulto podrá hacer también su interpretación. El teatro de títeres no es sólo para niños, sino también para adultos. Por eso esperamos que vengan grandes con chicos y grandes sin ellos, porque el títere tiene mucho para decir y lo ha hecho en distintos tiempos y espacios. La convocatoria es para todos".

"De amores, diablos y flores" es una historia desdoblada en dos partes. La primera, titulada "Por una flor", es de Luis Alberto Sánchez Vera y, según el programa que la anticipa, "sintetiza las vanidades y caprichos del poder, su violencia destructiva y su impunidad". La historia se desarrolla como un juego irónico entre el Rey Fulano -Oscar Caamaño-, y el Rey Mengano -Ruy Acevedo- que parodian las flaquezas de la alta política. Esta obra fue premiada en el Concurso Nacional de Obras para Títeres organizado por la Municipalidad de Santa Fe en los años '70.

La segunda parte son "Las aventuras de Juan Sin Miedo" que tienen su origen en un cuento tradicional que trata "de aventura, amor y valentía", adelantó Cristina.

Ambas son obras de Luis Alberto Sánchez Vera, quien dirigió durante décadas la Escuela Provincial de Títeres de Neuquén. Luis es creador del mítico teatro de marionetas "El barco de papel", que continúa la tradición marionetística de Podrecca. Es poeta y artista plástico. Pero más que nada es, según Cristina, "un titiritero que, con una manera de decir muy particular, utiliza el verso e incluye lecturas adultas en historias infantiles".

A poco de cumplir 28 años como titiritera, Cristina Pepe destaca que, entre las expresiones artísticas, los títeres son "un arte milenario bastante complejo que requiere la composición del objeto que luego es el títere. A través de él, se expresa el titiritero que, a diferencia del actor, pasa todas sus emociones por el ser que maneja con su mano, su voz y su cuerpo, se vea o no se vea".

"De amores, diablos y flores", de Luis Alberto Sánchez Vera. En "Por una flor", el Rey Fulano es interpretado por Oscar Caamaño y el Rey Mengano por Ruy Acevedo. En "Las aventuras de Juan Sin miedo", la princesa, el fantasma blanco y fantasma rojo son recreador por María Cristina Pepe; Juan Sin Miedo y los músicos por Oscar Caamaño y el soldado, el fantasma verde y el diablo por Ruy Acevedo. La dirección y puesta en escena son de Oscar Caamaño, y la codirección de María Cristina Pepe. El diseño visual fue realizado por Oscar Caamaño y la realización escenográfica, muñecos y utilería por Ruy Acevedo, Oscar Caamaño y Delia Moyano. Las fotografías son de Luis Cazes y la producción de María Cristina Pepe. La selección musical e iluminación es de El Retablo de las Maravillas. También colaboraron Graciela Martínez, Juanjo Vitale y Ángel Giolitti.