El orfeón se encuentra realizando una gira por Latinoamérica. En Santa Fe interpretará obras clásicas y populares de su país y del mundo.
De la redacción de El Litoral
El Instituto Coral, dependiente de Secretaría de Cultura de la provincia, presenta al coro Campanella dirigido por Jirí Klimes, de Olomouc, República Checa, en el Centro Cultural Provincial. La actuación está prevista para este domingo 29, a las 20. Este prestigioso coro, que está realizando una gira por Latinoamérica, interpretará obras clásicas y populares de la República Checa y del mundo. La entrada tendrá un costo de $4.
El Coro Campanella fue fundado en 1967 por los maestros Karel und Jirí Klimes, padre e hijo. En el transcurso de su existencia ha ofrecido más de mil conciertos en cuarenta países de Europa, Asia, América y Africa. En 2004 realizó su primera visita a América del Sur.>
Más de 600 cantores, con edades que van desde los 3 a los 18 años, integran hoy la institución. Además de conciertos propios, el coro actúa regularmente con la orquesta sinfónica de la Philarmónica de MŠhren, en representaciones de ópera en la Opera de Olomouc, y realiza grabaciones para radio y televisión.>
Campanella es anfitrión de uno de los mayores festivales del mundo, Los Días Festivos del Canto, en el que participan anualmente más de 200 coros, con alrededor de 10.000 coreutas, habiéndose celebrado este año la edición Nº 32. Es también el organizador del Festival de Pascua de Música sacra y Música Religiosa y de un festival dedicado a Mozart.>
Repertorio
El repertorio de los conciertos de Campanella es variado, comprendiendo composiciones de todas las épocas y estilos desde el coral gregoriano hasta la actualidad, así como arreglos de canciones folclóricas y populares. También acompañan con una coreografía especial a toda una serie de canciones.
El maestro Jirí Klimes, nacido en 1947, es egresado de la Universidad Palacky de Olomouc, donde se desempeña actualmente en la cátedra de Música como profesor de Dirección Coral.>
La prensa internacional ha destacado los valores de Campanella, sosteniendo que "las jóvenes voces se escuchaban parejas y con blandura en todos los registros, nunca forzadas; y sin embargo siempre estaban en condiciones de ofrecer un maravilloso crescendo que, como partiendo de la nada llenaba de sonoridad todo el recinto. Ningún gesto denotó esfuerzo, todo el coro parecía escucharse a sí mismo con entusiasmo".>
En otra ocasión, se consignó que "Campanella estableció un nivel tan alto que será difícil de superar aún para los `Dolby experts'... el increíble eco tridimensional creado por los cantores sonó tan natural como si se lo estuviera escuchando desde el otro lado del Grand Canyon... la impresión fue que Miguel Angel habría contratado a estos juveniles para que cantaran debajo de los frescos de la Capilla Sixtina".>
