Ciudadano Santotomesino Destacado
Luciano Alonso, el incansable maestro
Director en dos escuelas y luego supervisor, este docente cumplió un papel fundamental en la actividad educativa y cultural de nuestra ciudad. Como educador, siempre ha defendido a la educación pública y la democracia.

Ariel Durán - Sergio Ferrer

Días atrás, el recinto del Concejo Municipal de Santo Tomé se vio desbordado en su capacidad, puesto que la sala principal del cuerpo legislativo fue el centro de reencuentros y recuerdos, ligados a un protagonista de nuestra vida cívica en especial. Así, entre saludos y abrazos, todos querían estar cerca de él, flamante ciudadano destacado de Santo Tomé, Luciano Manuel Alonso, el decano de nuestros docentes.

Justamente, don Luciano concurrió al Concejo acompañado por sus hijos, nietos, viejos compañeros de ejercicio, entre ellos Juan Carlos Dávila (que obtuvo la misma mención en el año 2000) y la presidenta del Nucleamiento de Supervisores Jubilados de la provincia de Santa Fe -Zona Norte-, Alba Yobe de Abalo.>

A propósito de esto último, bien cabe resaltarse que la declaración a favor de Alonso fue propuesta, precisamente, por el citado núcleo, que en su momento solicitó de manera formal al Concejo que se ofreciera una distinción pública al reconocido educador, dada su larga y fructífera trayectoria. Luego de revisar los antecedentes del maestro, el cuerpo decidió por unanimidad concretar la misma.>

Entrega y dedicación

"He llegado a la vejez, habiendo trabajado, estudiado y esforzado, algunas veces hasta el sacrificio, pero jamás con la ilusión de ser reconocido, de manera que esto tiene, para mí, connotaciones de muchos tintes", confesó Alonso emocionado, al recibir su reconocimiento. "Agradezco la distinción que se me otorga y, sobre todo, que hayan puesto la vista en un maestro, que si bien se ha capacitado y ejercido en niveles medios e inferiores, se considera fundamental y terminantemente un simple maestro de escuela, de ésos que anduvieron por el campo y las ciudades y que está llegando al final de la vida, sin haber descansado jamás", manifestó más tarde, ante la requisitoria de nuestra colaboradora Natalia Spais.

Alonso nació el 30 de abril de 1922 en la ciudad de Santa Fe, pero durante la década de los años veinte y principios de los treinta habitó con su familia la zona rural de Santo Tomé; no obstante ello, al tiempo -más precisamente tras el fallecimiento de su padre-, volvió junto a su madre y su hermana a Santa Fe, donde cursó sus estudios y comenzó a ejercer la docencia. En 1959 regresó a Santo Tomé para radicarse definitivamente en ella, donde desempeñó tareas como director de la escuela N° 14 Profesional Nocturna (hoy Escuela de Educación Técnica N° 614 Enrique J. Muzzio) y N° 15 Juan de Garay.>

Posteriormente fue supervisor de escuelas locales, para luego asumir la supervisión de establecimientos de Educación Técnica de la provincia. En nuestra ciudad, también participó como secretario de la Comisión Comunal de Cultura, actividad durante la cual escribió dos publicaciones, dando a conocer los fundamentos para asignar el nombre 12 de Septiembre a una calle del pueblo y Faustino M. San Juan al Liceo Municipal.>

Compromiso con la enseñanza

La amplitud de conocimientos adquiridos y su permanente compromiso con la enseñanza, llevaron a don Luciano a ejercer su profesión en los tres niveles del sistema educativo en distintas localidades de la provincia. En tal sentido se podría señalar que ha sido maestro de nivel primario; profesor de Filosofía, Pedagogía y Educación Técnica; así como se ha destacado en el dictado de cursos y conferencias. Aún hoy, a pesar de su avanzada edad y de ciertas dificultades físicas, continúa trabajando y apoyando la actividad docente.

"No sólo aparezco en las tribunas doctrinarias, haciendo exposiciones pedagógicas e históricas, sino que también concurro a las concentraciones de mis compañeros en actividad, porque están defendiendo los intereses de los maestros y a la escuela pública, obligatoria y gratuita", remarcó el ahora ciudadano destacado de Santo Tomé, que ha sido, además, un permanente investigador de la legislación escolar y en su momento tomó parte activa en la elaboración del documento que reformó el dictado del Trabajo Normal Educativo.>

Por último, bien cabe acotar que Alonso también supo dar muestras de su faceta de narrador en folletos y artículos educativos, así como en la autoría del libro "Haydée Guy de Vigo. La docencia militante", relacionado a la vida de la referida docente. Inclusive, desde hace cuatro años y medio se encuentra dedicado a escribir la historia de la educación de la provincia de Santa Fe, para cubrir una parte importante de la bibliografía ya existente. "Si bien es cierto que últimamente dejé descansar un poco el bolígrafo, les prometo que voy a terminar mi tarea; ya falta poco. Además, es el compromiso de trabajo que puedo asumir frente a ustedes; el único tipo de compromiso que sé adoptar", concluyó el estimado maestro, vecino santotomesino por adopción.>

Impulsor

Durante su carrera, Luciano Alonso participó en la creación de varios establecimientos educativos de nuestra región: escuelas agrotécnicas, profesionales nocturnas y talleres de oficio. Su labor posibilitó la formación educativa en localidades del interior de la provincia como Villa Ocampo, La Gallareta, Colonia Belgrano y Villa Trinidad, entre otras. Para concretar dichos proyectos, tomó parte activa de los mismos, en el marco de estudios que incluían análisis demográficos zonales, población en edad escolar, desenvolvimiento comercial y principales actividades del lugar; a la vez que debía detallar el perfil y nivel de la futura institución, el conjunto de especialidades técnicas, cantidad eventual de egresados y absorción local de poblaciones vecinas.

"Algo ha cambiado"

A lo largo de su actividad docente, Luciano Alonso luchó por mantener los principios de la escuela común, obligatoria y laica, convencido de que la educación es un derecho de hombres y mujeres de todas las creencias. Fue reprimido por reivindicar la educación solidaria y democrática, pasando a integrar -por ello- el grupo de los veintiún maestros santafesinos que sufrieron la cesantía en el año 1944, debido a la defensa de los ideales sarmientinos, la Ley 1420 de Educación Común y el gremialismo independiente.

Reincorporado a la actividad docente, defendió la paz, haciendo prevalecer los derechos de los ciudadanos y la libertad de expresión. "En su momento, los usurpadores del poder, en las llamadas intervenciones militares, me dejaron cesante una vez durante un año y medio, otra vez seis años y los siete años de la última dictadura; que este Cuerpo de Estado, integrado por representantes populares y elegidos por los mismos santotomesinos, me entregue una distinción, significa que algo ha cambiado en el país; evidentemente algo ha cambiado en las instituciones y también algo cambió en la política", expresó Alonso en el acto de reconocimiento, a modo de reflexión final.