Análisis
El padre de la criatura
Por Sergio Torres (x)

Está jugando la selección Argentina un amistoso con Chile en Mendoza, y Carrizo, arquero de River Plate y de nuestro combinado nacional, toma la pelota y mete un pase de volea bajo, rápido y muy preciso, depositándola en los pies de Palacio en tres cuartos de cancha, en una situación de ataque muy ventajosa. La transmisión televisiva se enriquece con los comentarios del relator que, en ese momento, elogia la acción del arquero argentino, sugiriendo que "algo tendrá que ver el Pato con todo esto", haciendo referencia al trabajo del entrenador de arquero de la selección: el inigualable Ubaldo Matildo Fillol.

Lejos de querer cuestionar los trabajos del entrenador, es evidente que el halago resulta excesivo, por no decir inmerecido. La trayectoria del Pato es impresionante y la experiencia adquirida en su extensa carrera debe ser igualmente enriquecedora para sus discípulos. Sin embargo, es injusto adjudicarle tanto mérito. ¿Lo aprendió Carrizo de Fillol en unas pocas prácticas? Definitivamente, >

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Como cualquier deportista, el arquero de fútbol se desarrolla a partir de determinadas condiciones naturales que lo favorecen, sin las cuales sería imposible alcanzar objetivos importantes en el fútbol profesional, sin mencionar la importancia de las oportunidades, las lesiones, la continuidad o, en el último de los casos, la suerte (para los que creen en ella).>

Pero, además, el camino recorrido -la historia del jugador- está formado por una innumerable cantidad de sucesos tan variados y, a la vez, tan particulares, que lo afectan de forma personal. Los clubes que lo cobijaron y los entrenadores que lo formaron son, indudablemente, parte de esa historia.>

Adjudicarse o adjudicar méritos tan puntuales es desconocer que el jugador se nutre de absolutamente todas sus vivencias, de los buenos y malos entrenadores y entrenamientos en los clubes modestos donde se iniciaron y en aquellos de renombre donde continuaron creciendo y, finalmente, se consagraron. Muchos entrenadores dicen que tal jugador llegó gracias a ellos, pero no se oye muy seguido confesar que llegaron a pesar de ellos. Ni hablar de los que quedaron en el camino.>

Pero si, en todo caso, se tratara de asignar la paternidad deportiva, consideremos que este arquero fenomenal que está surgiendo con tanto suceso tiene una parte de su ADN deportivo más parecido al de su entrenador santafesino de inferiores en River, que al actual entrenador de la selección nacional. Es Gustavo Nepote, que tiene una parte de esa historia que se está construyendo alrededor del pibe Carrizo.>

(x) Entrenador de arqueros de Unión y Agua y Energía.>