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Wall Street arrancó con pérdidas que rondaban el 4 %. Luego del anuncio las bolsas europeas repuntaron, pero sobre el cierre volvieron a caer. Los líderes mundiales pidieron no alarmarse ante la situación.
Ni la decisión imprevista de la Reserva Federal de los Estados Unidos de bajar la tasa de interés de referencia en tres cuartos de punto hasta los 3,50% ni la negación de la vocera de la Casa Blanca, Dana Perino, de que vaya a haber una recesión en Estados Unidos, aunque admitiendo una desaceleración, evitaron otro día negro en los mercados mundiales.
Apenas hecho el anuncio de la baja de tasas norteamericana, los mercados de Europa, que habían empezado a funcionar con pérdidas, se recuperaron, pero después de la apertura de Wall Street volvieron a caer.
La Bolsa de Nueva York se derrumbaba este martes en la apertura: el Dow Jones perdía 3,60% y el Nasdaq caía 5,01%. El Dow Jones Industrial Average (DJIA) abandonaba 435,87 puntos, cayendo bajo la barra de los 12.000 puntos (11.663,43 unidades) y el índice Nasdaq de los valores tecnológicos, bajaba 117,12 puntos a 2.222,90 unidades. El índice ampliado Standard and Poor's 500 perdía 3,51% (-46,51 puntos) a 1.278,68.
Esto terminó con las pocas expectativas que había despertado la rebaja de tasas y, al cierre de esta edición, todos los mercados volvían a caer, salvo el de Buenos Aires donde la rueda comenzó con una suba del 1,48%, aunque persistía una fuerte volatilidad.
También al cierre de esta edición, la Bolsa de Valores de Sao Paulo operaba con un alza de 2,57% tras la debacle del lunes cuando su índice Ibovespa cayó 6,6%.
Más tranquilos
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, pidió mantener la "sangre fría" frente a la crisis financiera y reclamó más transparencia en el sistema financiero internacional. A su juicio, se ha dado mucho margen a "comportamientos de especulación en detrimento de los empresarios".
Horas antes de esta declaración de Sarkozy, la ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, ya había hecho otro llamamiento a la "transparencia" en los bancos europeos sobre sus cuentas para "disipar las dudas" y permitir que se restablezca la confianza de los mercados.
En tanto, el vicepresidente segundo del gobierno español, Pedro Solbes, volvió hoy a pedir calma, convencido de que ni Europa ni España corren riesgo de recesión y de que la política económica aplicada hasta ahora es la adecuada para hacer frente a la desaceleración.
"Ni crisis ni inacción o despreocupación por el tema", subrayó Solbes, quien insistió en esperar para ver el alcance de las turbulencias bursátiles, ya que "antes de disparar es mejor apuntar".
A su turno, el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, instó a Estados Unidos a reducir sus déficits, estimando que era la "principal" causa de la crisis financiera estadounidense.
"El Reino Unido está bien posicionado para afrontar las turbulencias financieras", dijo el primer ministro británico, Gordon Brown. No obstante, consideró que el gobierno debía permanecer "vigilante" ante la actual incertidumbre de la economía internacional.
En tanto, Angela Merkel dijo que "no hay indicios de que vaya a haber una recesión en Alemania. Hay que decirlo con claridad". Según Merkel, Europa y Alemania ya no dependen tanto de la coyuntura en Estados Unidos.
Por su parte, el secretario del Tesoro estadounidense, Henry Paulson, pidió hoy un plan de estímulo para la economía de Estados Unidos que tenga "impacto inmediato".
"El tiempo es esencial y el presidente (George W. Bush) está preparado para trabajar con ambos partidos en un ánimo bipartidista para que se apruebe, tan pronto como sea posible, una legislación que estimule el crecimiento económico", dijo Paulson ante la Cámara de Comercio de EE.UU..
Resultados negativos en Asia
Las bolsas asiáticas volvieron hoy a operar en caída libre, tras la jornada negra del lunes, en medio de una ola de pánico de los inversores ante una posible recesión en los Estados Unidos, pero sin conocer aún la baja en las tasas.
En Tokio, el índice Nikkei bajó 5,65 por ciento; y en Hong Kong, el índice Hang Seng cayó 8,6 por ciento; al igual que las bolsas chinas.
El índice de Shanghai cerró 7,22 por ciento abajo (tras la caída de 5 por ciento de ayer), el peor resultado en más de siete meses; y el Shenzhen Composite, del mercado más pequeño en el sur de China, perdió 7,66 por ciento.
En Seúl, el índice Kospi se retrajo 4,4 por ciento; y la bolsa de Yakarta (Indonesia) se desplomó 7,69 por ciento.
El índice principal de la India, el Sensex, llegó a desplomarse más de 9,5 por ciento, la mayor caída en un día de la historia de la Bolsa de Bombay.
El intercambio fue suspendido una hora poco después de la apertura, y el gobierno indio llamó a los inversores a la calma, de acuerdo con un despacho de la agencia DPA.
Informaciones posteriores acerca de la buena salud de la economía india hicieron que los mercados se recuperaran y, aunque los resultados siguen siendo negativos, en torno a un cuatro por ciento, son menos graves.
La misma tendencia se registró en Nueva Zelanda y Australia, donde el índice All Ordinaries perdió 5,7 por ciento, en su duodécima caída consecutiva -el más largo encadenamiento de pérdidas en 25 años. El neozelandés NZX50 perdió por la mañana casi un cuatro por ciento, la mayor parte en los primeros diez minutos de intercambio.
En Tailandia, el índice SET cayó a su vez 24,99 puntos, 3,26 por ciento; en Filipinas 5,52; y en Malasia el 1,45.
Soros
El inversor estadounidense George Soros considera que la actual crisis financiera es mucho peor que cualquier otra registrada desde la Segunda Guerra Mundial. Opinó que Estados Unidos está amenazado por una recesión de la que puede contagiarse Europa, aunque esto no sea comprendido así en el Viejo Continente. A su juicio, el paquete de medidas fiscales propuesto recientemente por el presidente Bush tiene poco sentido.
Soros manifestó que la situación de las finanzas internacionales es sumamente complicada, entre otras razones por los "malentendidos" por los que se ha dejado llevar en los años pasados la política, que ha caído en lo que define como el "fundamentalismo del mercado". Agregó que el error parte de la creencia de que los mercados financieros tienden a compensar los desequilibrios que surgen en las finanzas, lo que es -en su opinión- falso y ésta es la razón por la que ahora existe una crisis financiera.
Corrección
El secretario norteamericano del Tesoro, Henry Paulson, indicó en esta jornada que estaba en estrecho contacto con sus homólogos extranjeros para seguir el desarrollo en los mercados financieros, a lo cual calificó de "corrección bursátil". Paulson indicó durante un discurso en Washington que estaba "en contacto activo con los actores políticos aquí y en el mundo para seguir atentamente la corrección mundial del mercado de acciones". El alto funcionario afirmó mantener su confianza "en la fuerza intrínseca de la economía mundial".
Todos apuntan para otro lado
En el Ministerio de Economía argentino no esperan que la crisis que afecta a los Estados Unidos pueda tener consecuencias en la plaza local, ya que la posición del país, consideran, "es sólida" y no requiere mayor financiamiento para este año.
La semana pasada, el propio ministro de Economía, Martín Lousteau, habló de la firmeza del país. Los superávits fiscal y comercial "nos permiten estar aislados de los problemas de las economías mundiales y dan a Argentina una fortaleza muy importante en el medio de un contexto de incertidumbre en la comunidad financiera internacional", dijo.
En tanto, el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, reclamó a Estados Unidos que asuma la responsabilidad de evitar que la crisis económica global se extienda a América Latina y África, aunque garantizó que su país está "tranquilo" y "sólido" ante la turbulencia.
"Los países de América Latina y otros de África que pasaron prácticamente treinta años sin crecer, ahora encontraron el crecimiento, y no es posible que personas que no tienen una casa en Estados Unidos, que no tuvieron una hipoteca, paguen la crisis de la irresponsabilidad de algunos que resolvieron ganar dinero fácil", completó el presidente.
En México, el gobierno no se quedará "de brazos cruzados" ante la eventual recesión de Estados Unidos, el principal socio del país latinoamericano, y confía en que la vivienda y la inversión pública impulsarán el crecimiento, dijo el lunes el presidente Felipe Calderón.
En el Viejo Continente, los ministros de Finanzas de la zona euro (Eurogrupo) y la Comisión Europea reconocieron que es posible que la economía estadounidense ingrese en recesión, pero dejaron claro que ese riesgo no existe en el caso de Europa, cuya economía es muy sólida.
Al término de la reunión mensual del Eurogrupo, el presidente de este foro informal, Jean-Claude Juncker, primer ministro luxemburgués, admitió que la coyuntura económica es "muy volátil", pero recordó que la UE cuenta con mecanismos y margen de maniobra para hacer frente a una hipotética desaceleración.
El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, también incidió en la solidez de la economía europea que, a pesar de las turbulencias financieras y la crisis en Estados Unidos, seguirá creciendo y creando empleo.
Finalmente, varios ministros japoneses mantuvieron hoy que el gobierno no tomará ninguna medida con relación al fuerte desplome de la bolsa de Tokio y la apreciación del yen contra el dólar, según informó la agencia Kyodo.
Estas declaraciones vienen a reiterar la idea expresada por el primer ministro, Yasuo Fukuda, hace una semana de que, a pesar del pánico en el mercado de valores, la economía real goza de buena salud.
