Los precios del cereal han estado subiendo más que los del combustible, por lo que no sorprendió que durante esta semana se suspendiera el funcionamiento de diversas plantas de etanol en Estados Unidos. Algunas cerraron o suspendieron la finalización de obras por el deterioro en los márgenes del negocio.
Flavia Rossi
La semana pasada se comentaba en este suplemento que el Consejo Internacional de Granos (IGC) advirtió que los stocks de maíz en el mundo caerán 23 por ciento el ciclo 2008/2009. Días atrás, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (Usda) ratificó la idea de que la campaña que se aproxima será más ajustada y estimó que los stocks caerán 15 por ciento respecto a la campaña 2007/2008.
El mercado ha estado muy preocupado ante la posibilidad de que el resultado final se asemeje más a la estimación del IGC que a la del Usda. Los cultivos en Estados Unidos están muy afectados por el clima y el abandono de área podría terminar siendo mayor a los tres millones de hectáreas que se pensaba meses atrás.
Hace días que grandes extensiones de tierra sembradas con maíz y soja en la zona núcleo están cubiertas de agua y deberán ser resembradas. Se acorta el tiempo del cereal y se especula con que aumente la cobertura de la oleaginosa.
Los nervios se crisparon durante junio. Los precios del maíz marcaron nuevos máximos acercándose a 300 dólares por tonelada en las posiciones más cercanas. La pelea de área todavía está en marcha y el maíz no podía andar solo por este camino. Por eso es que las alzas también empujaron a la soja por encima de 570 dólares.
Recorte
La semana pasada, el Usda hizo un fuerte recorte en el potencial de rinde de maíz, con lo que la baja anual de producción se estimó en 34 millones de toneladas, es decir, 298 millones contra 332 millones de toneladas.
Curiosamente, según el organismo, la menor producción no afectará al consumo interno total en Estados Unidos. Por eso, para que durante el ciclo 2008/2009 se puedan moler 25 millones de toneladas más de maíz para etanol superando los 100 millones de toneladas el país deberá recortar en esa misma magnitud el uso forrajero.
De a poco esto se está dando reemplazándolo por sorgo, harinas proteicas, pasturas y trigo aunque habrá que ver cuál es la posibilidad final del cambio. Para el Usda, la menor oferta repercutiría íntegramente en el saldo de exportaciones y de stocks finales. Lo llamativo es que aún recortando en más de 10 millones de toneladas el monto de ventas externas, la campaña 2008/2009 terminaría con los mínimos stocks de los últimos 13 años.
Nacional o importado. Los altos precios del maíz no sólo racionaron el consumo forrajero, sino que ponen en duda las 100 millones de toneladas para etanol. En el transcurso de los últimos meses, los precios del grano han estado subiendo más que los del combustible, por lo que no sorprendió que durante esta semana se suspendiera el funcionamiento de diversas plantas de etanol.
Algunas debieron cerrar o suspender la finalización de las obras por el deterioro de los márgenes frente a la suba de su principal materia prima. Otras simplemente quedaron bajo agua ante la rotura de represas (entre tres y cuatro por ciento de la capacidad total de procesamiento).
Rumores
Ante la dificultad de cumplir con los objetivos nacionales, esta semana hubo rumores de que el gobierno de Estados Unidos reducirá los subsidios a la producción interna y los aranceles de importación de etanol, con el objeto de aliviar el balance interno de maíz e importar el combustible vegetal terminado para destinarlo al consumo directo.
Como es de esperar, el país más beneficiado de esta operación sería Brasil, que como segundo productor mundial de etanol es el principal proveedor de Estados Unidos. Precisamente, con los precios actuales, será difícil que la soja siga expandiendo su área en el país carioca, porque en el sur el maíz está siendo mejor negocio.