Natural y curioso

Yerra y Doma en Santa Fe la Vieja.

La Marcación del ganado en la etapa fundacional representaba el comienzo de la ganadería organizada. La costumbre española era marcar el ganado el 24 de junio -día de San Juan Bautista-, fecha a la que se atribuía efectos mágicos, según tradiciones comunes a toda Europa anteriores a la era cristiana, cuando festejaba el mundo pagano el advenimiento del solsticio de verano con fogatas a cuyo alrededor, o por encima hacían pasar rebaños y ganados.

Los trabajos de yerra y castración del ganado en el Río de La Plata se concentraban en éste día, por coincidir con la entrada del invierno y por la mayor seguridad de que con el frío no se produzcan hemorragias ni abichaduras que estimula el calor. Las vacas criollas eran llevadas al Río de La Plata por los primeros pobladores de Santa Fe y sirvieron de base genética para todas las razas posteriormente producidas en el país.

Con la expedición de Garay desde asunción, llegan los primeros caba-llos a Santa Fe y por ende el desa-rrollo organizado de la ganadería caballar. Aún cuando cabe destacar la importancia que tenía la calidad de los caballos, más importante que el caballo era el jinete y domador, por ello Garay vino acompañado por mayoría de muchachos, “Mancebos y bien mancebos” hijos de españoles e indias, producto de una de las mestizaciones más grandes que se conocen en la historia de la humanidad.

En Cayastá se celebran dos fiestas anuales, que tienen carácter provincial: La Fiesta de la Yerra, que conmemora la primera hierra de ganado del Río de La Plata del 24 de junio de 1576, y la Fiesta de la Doma, que se celebra en noviembre, como parte de los actos conmemorativos de la fundación de Santa Fe.

Historia. Las primeras marcas se exhiben en el museo de Santa Fe la Vieja.

foto: cayasta.gov.ar