En la región central triguera

El rinde promedio es de 15 qq/ha

Lo confirmaron los técnicos del INTA Marcos Juarez en el reporte preliminar de cosecha. El área sembrada es la más baja de los últimos 30 años. La producción argentina caería entre un 36 y un 42%.

Martha Cuniberti, Leticia Mir,

Omar Berra y Susana Macagno.

INTA Marcos Juarez

En la actual campaña triguera el mercado mundial de trigo presenta una abundante oferta debido a las excelentes cosechas del hemisferio norte. Algunas regiones se vieron más favorecidas como el bloque europeo que cosechó 150 millones de toneladas, 30 más que la campaña anterior y EE.UU con 12 millones de toneladas superior al ciclo precedente.

En contraposición a esto, la producción argentina caería entre un 36% y 42% en relación al ciclo anterior, estimándose según la Secretaria de Agricultura en 9 millones de toneladas, con un rinde promedio nacional que podría estar alrededor de los 22 qq/ha. Esta cifra es un 21% inferior a la campaña pasada.

La principal causa de esta caída en la producción se debió en primer lugar a la reducción del área sembrada que fue la más baja de los últimos 30 años y luego a la fuerte sequía que afectó durante el ciclo del cultivo a la mayor parte del área triguera argentina (por esta causa muchos lotes no se están cosechando).

Además se sumaron las heladas tardías y el estrés calórico en llenado de grano que afectaron el tamaño de los mismos en relación a otras campañas. El clima seco y caluroso aceleró la cosecha.

En Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y centro-norte de Buenos Aires las caídas de rendimiento fueron muy significativas, lo mismo que en Salta y Tucumán, centro-sur de La Pampa, el sudoeste y extremo sur de Buenos Aires.

El Laboratorio de Calidad de Cereales y Oleaginosas del INTA de Marcos Juárez realiza al momento de la cosecha un muestreo en acopios y cooperativas de la región central del país. Este año se “muestrearon” 190.000 toneladas. Esta cantidad es significativamente inferior a otras cosechas debido a que había muy poco trigo en los acopios.

En la región investigada, el rinde promedio se ubicó en los 15 qq/ha, con máximos de 28 qq/ha y mínimos de 5 qq/ha.

En años de baja producción, la proteína y el gluten suben y se observa una mejor calidad industrial en las harinas en general. Pero en la cosecha actual, la calidad comercial fue sensiblemente disminuida por el estrés calórico, la sequía y las heladas tardías que afectaron a lotes que se encontraban en llenado de grano. La consecuencia fue una significativa presencia de granos chuzos por arrebatamiento.

Los datos en cada zona

En la subregión II Norte (sur de Santa Fe, sudeste de Córdoba y norte de la Pcia. de Buenos Aires) el peso hectolítrico fue de 78 kg/hl, ubicándose 4 puntos por debajo de la cosecha pasada.

En la V Norte (centro-sur de la Pcia. de Córdoba) fue de 79,10 kg/hl con 3 puntos menos que el ciclo anterior. La mayoría de las partidas estuvieron dentro de Grado 2 de comercialización. El peso de 1.000 granos fue de 29 gramos en la II Norte y de 30 g en la V Norte , 5 y 4 puntos por debajo respectivamente de la campaña 2007/08. La ceniza en grano aumentó en relación a la cosecha anterior por la presencia de granos chuzos, con un valor de 1,967% en la II Norte y 1,964% en la V Norte.

La proteína fue 2,4% superior a la cosecha precedente en la II Norte con un promedio de 13,5% (base 13,5% de humedad) y de 1,5% superior en la V Norte con un promedio de 12,9%.

De acuerdo al estándar, la base de comercialización es del 11% de proteínas, con bonificaciones del 2% por cada por ciento o fracción proporcional de incremento siempre que el peso hectolítrico sea de 76 kg/hl o superior, sino no será bonificado porque se considera que un grano chuzo, no bien lleno, rinde menor cantidad de harina en la molienda y por lo tanto pierde valor comercial e industrial.

Para concluir se remarca la buena calidad industrial de los trigos de la presente cosecha dada por el alto contenido de proteína y gluten, buenos valores de fuerza panadera, masas extensibles pero de buena estabilidad y buen volumen de pan. La caída en el peso hectolítrico afectó la calidad comercial del grano en general.

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Menos trigo. En Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y centro-norte de Buenos Aires, las caídas de rendimiento descendieron - como mínimo - un 20% en comparación con la campaña pasada.

Foto: Mauricio Garín

La fuerza panadera

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en relación

El gluten se correspondió con la proteína como era de esperar. En conjunto presenta valores generales de 32,7% en la II Norte, 6,7% superior a la cosecha pasada y de 32,4% en la V Norte, 4,7% superior a la campaña 2007/08, con un gluten index de 82 y 86 respectivamente, indicando glutenes flojos, extensibles.

La mayoría de las muestras tuvieron valores superiores a 30%, con mínimos de 24% y máximos de 45%, habiendo lotes aislados de hasta 50% correspondiéndose con muy bajos rendimientos en grano.

La fuerza panadera medida a través del W del alveograma fue de 320 y 337 julios x 10-4 en ambas subregiones, 75 y 77 unidades superiores a la cosecha pasada en las subregiones II Norte y V Norte respectivamente.

Los farinogramas mostraron en general baja absorción de agua, buen tiempo de desarrollo y muy buena estabilidad de las masas.