En esta temporada
La selección buscará la clasificación para el 2010
El mayor desafío que afrontará el seleccionado argentino de básquetbol masculino en el año que se inicia será el Torneo de las Américas, clasificatorio para el Campeonato Mundial, hasta ahora, de Turquía de 2010.
Ese certamen puede marcar el final del brillante ciclo de la “generación dorada”, ya que allí sería la última vez que jueguen con la camiseta argentina Emanuel Ginobili y Fabricio Oberto, dos de las figuras más representativas en la última década, y que en para esa fecha tendrán 33 y 35 años, respectivamente.
No obstante, en la cita programada por Fiba América entre el 19 y el 30 de agosto en sede a licitar -los que cuentan con mayores posibilidades de organizarla son México y Puerto Rico- habrá en juego cinco plazas para el certamen ecuménico y Estados Unidos no participará por ser el actual campeón olímpico, título que le dio el pasaje directo al Mundial.
Todavía falta mucho tiempo y es prematuro vaticinar con que equipo irá el entrenador Sergio Hernández, aunque se descartan que el equipo girará en torno a Luis Scola, Andrés Nocioni y Pablo Prigioni, ya que es difícil que forman parte de ese plantel “Manu” Ginóbili, Oberto y Walter Herrmann, quien habría decidido por el momento no jugar más para el seleccionado albiceleste.
En caso de que Argentina no logre clasificarse, algo impensado, la Fiba le daría una invitación para estar presente en Turquía.
Como parte de la preparación para el Premundial, el seleccionado nacional participará en el Torneo Súper 4 a concretarse en la segunda quincena de agosto y en sede a designar (sería en el interior del país).
Posteriormente lo hará en una nueva edición de la Copa Genaro Tuto Marchand, a jugarse entre el 14 y el 16 de ese mes en sede a definir.
Mientras que los seleccionados de divisiones formativas tendrán una exigente agenda y la más importante será el sub 18, que tomará parte en el Campeonato Mundial a efectuarse en Auckland, Nueva Zelanda entre el 2 y el 12 de julio.
Argentina ganó ese derecho al ser primero en el Panamericano jugado en Formosa, donde venció en la final al poderoso Estados Unidos.
