Después de 15 días de sacrificio y emociones

LA AVENTURA LLEGÓ A SU FIN

El Dakar 2009 culminó inmerso en el reconocimiento popular que acompañó cada una de sus 14 etapas, desarrolladas en territorios argentino y chileno. Calculan que casi dos millones de personas lo presenciaron en los diferentes sitios destinados para tal fin.


 

LA AVENTURA LLEGÓ A SU FIN

Redacción de El Litoral

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AFP, EFE y Télam

Como era previsible, atendiendo a lo acontecido en las últimas etapas, el sudafricano Giniel de Villiers ganó ayer el Rally Dakar Argentina Chile 2009, que en su trigésima edición dejó por primera vez el territorio africano para desarrollar sus 14 etapas en Sudamérica.

De Villiers, al volante de un Volkswagen y en compañía de su copiloto alemán Dirk Von Zitzewitz, sucede en el historial al múltiple campeón, el francés Stéphane Peterhansel, ganador de la prueba en 2007, quien abandonó la carrera en la séptima etapa por un problema en el motor.

Asimismo, De Villiers, de 36 años, es el primer africano que logra el título en las tres décadas de existencia de la célebre competición, la que en 2008 no se disputó como consecuencia de amenazas terroristas de Al Quida a su paso por Mauritania.

“Es absolutamente increíble. Jamás he sentido tamaña emoción. Estaba muy nervioso en los últimos kilómetros y no dejaba de mirar cuántos kilómetros nos quedaban. Pero debo decir que es un sentimiento increíble. Estoy muy contento con el equipo, porque Volkswagen nos sostuvo durante cinco años para llegar a esta victoria””, aseveró el sudafricano, segundo en 2006.

De Villiers sacó provecho el jueves durante la duodécima etapa del retiro por accidente del entonces cómodo puntero, el español Carlos Sainz (Volkswagen), para asumir el liderazgo y a partir de entonces se dedicó a conducir con precaución para finalmente celebrar en Buenos Aires.

El abandono de Sainz se sumó a los retiros de otros favoritos al título: Peterhansel (Mitsubishi), con nueve coronas en el Dakar -6 en motos y 3 en autos-; el también francés Luc Alphand (Mitsubishi), ganador en 2006; además de la expulsión del qatarí Nasser Al Attiyah (BMW), cuando marchaba como líder.

Detrás de De Villiers, llegó su compañero de equipo, el estadounidense Mark Miller, segundo en la general a 8 minutos 59 segundos; mientras que el también norteamericano Robby Gordon (Hummer), se quedó con la tercera plaza a 1 hora 46minutos 15 segundos.

En Motos

En lo que respecta a las dos ruedas, el español Marc Coma, con KTM -campeón de la especialidad en 2006- , ganó ayer un nuevo título con total autoridad, ya que de punta a punta se mantuvo al frente de la clasificación general.

El catalán, de 32 años, venció en la primera especial, el 3 de enero con salida en Buenos Aires, y agregó otros dos triunfos, en las etapas tercera y cuarta, para dominar a sus rivales, en especial al francés Cyril Despres (KTM), campeón en 2005 y 2007.

“Tantos días de competición, tanto trabajo, la verdad que estoy muy contento. Ha sido una carrera bastante complicada. No conocíamos bien el terreno y, por lo tanto, es difícil definir la táctica. Quisiera dar las gracias a todo el equipo. Han realizado un trabajo fantástico. Hay muchas personas trabajando que también se merecen esta victoria. Ahora quiero saborear el momento”, señaló emocionado el flamante campeón.

Despres finalmente fue segundo en la general, a 1 hora 25 minutos 38 segundos de Coma; mientras que la tercera plaza fue para el también galo, David Frétigné (Yamaha), a 1 hora 38 minutos 56 segundos.

Los “gigantes”

El piloto ruso Firdaus Kabirov se proclamó ayer ganador del Dakar Argentina-Chile 2009 en la categoría Camiones, tras imponerse en la última etapa a su compatriota Vladimir Chagin, al que aventajó por 39 segundos.

El ruso repitió el éxito conseguido en 2005, con casi cuatro minutos de ventaja en la general sobre Chagin, que no pudo conseguir el que habría sido su sexto título del Dakar. El tercer escalón del podio fue para el holandés Gérard De Rooy, a casi una hora del ganador final de la prueba.

 
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El Kamaz de los rusos Kabirov, Bleyaev y Andrey luce más imponente que nunca tras haberse adjudicado la categoría Camiones.

Foto: EFE

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EL DATO

El cierre

La decimocuarta y última etapa del Dakar 2009, desarrollada sobre 792 kilómetros entre Córdoba y Buenos Aires, con un especial de 227 kilómetros entre la capital cordobesa y Carcaraña, dejó como ganadores a De Villiers en Automóviles, con 1 hora 35 minutos 43 segundos y al brasileño Helio Rodrigues Filho (KTM), en Motos, con 1 hora 42 minutos 37 segundos. Tras cerrarse la etapa de velocidad en la citada localidad del sur de la provincia de Santa Fe, la calificada troupe prosiguió el enlace final hacia Capital Federal.

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ADEMÁS

Patronelli, el héroe argentino

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El argentino Marcos Patronelli se consagró ayer subcampeón del Rally Dakar Argentina-Chile 2009 en la categoría de los Cuatriciclos, luego de finalizar en el séptimo puesto de la última etapa de la competencia, que en esta categoría fue ganada por el checo Josef Machanek (Yamaha).

“No lo puedo creer, esto nunca lo soñé y la alegría que tengo es imposible de contar, estoy muy emocionado. Esta etapa fue de muchos nervios, porque teníamos algunos problemas con el motor; por eso sufrimos hasta el final y ahora tenemos esta satisfacción tan grande”, dijo Patronelli al llegar a Carcarañá, en el sur de la provincia de Santa Fe, donde se cerró el último especial de la prueba.

Si hay algo que distinguió a esta mítica competencia que por esta vez cambió su territorio natural, fue la pasión con la que se vivió por parte del público argentino y chileno, a lo largo de todo su recorrido, donde miles de espectadores la siguieron con entusiasmo.

El mismo que seguramente seguirá proyectándose hoy, aunque con mayor calma, ya que las máquinas permanecen en el predio de la Sociedad Rural de Buenos Aires, donde pueden seguir siendo visitadas. El momento más duro se vivió con el fallecimiento del motociclista francés Pascal Terry, quien se extravió durante la segunda etapa -4 de enero- entre las ciudades argentinas de Santa Rosa de la Pampa y Puerto Madryn. Terry, de 49 años, fue encontrado sin vida en la madrugada del 7 de enero. El juez argentino encargado de la investigación, aseveró que Terry murió de un paro cardíaco ocasionado por un edema pulmonar, que tenía su origen en una cardiopatía preexistente.