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OPINIÓN

Gripe A, poca cosa

Por Jean-Louis Santini - AFP

La gripe porcina, objeto de enorme cobertura internacional, es poca cosa frente a otras enfermedades -la gripe común, sin ir más lejos- que anualmente dejan millones de muertos en todo el mundo, aseguran los expertos.

La gripe estacional afecta mundialmente a entre 57.000 y 96.000 personas por semana, con entre 4.800 y 9.600 casos letales, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Desde que se desató la epidemia hace diez días, la gripe porcina ha sido detectada en una veintena de países, con más de 1.000 casos -en su mayoría benignos-, y registra 26 muertes en México y una en Estados Unidos.

“Esta infección se comporta como lo que llamamos gripe estacional, como una típica y común brote de influenza”, dijo James Nataro, epidemiólogo en la Universidad de Maryland, en el este de Estados Unidos. “No se comporta como la pandemia de influenza de 1918”, dijo en referencia a la gripe española, considerada la mayor plaga del siglo XX, que causó al menos 40 millones de muertos en el mundo entre 1918 y 1919.

La cifra de muertes atribuidas a la gripe porcina sigue baja con respecto a las registradas cada año a consecuencia de la gripe estacional, señaló el experto, que también destacó la moderada virulencia con que se manifestó el virus A (H1N1) hasta el presente.

“En este momento intentamos mantener un optimismo cauteloso frente a una actividad febril”, dijo Nataro.

Según la OMS, cerca de 90% de las muertes a causa de enfermedades infecciosas se deben a seis infecciones -tuberculosis, neumonía, diarrea, sarampión, paludismo y sida-, que afectan más que nada a los países pobres.

El mayor peligro para los humanos proviene de la enorme variabilidad genética de virus comunes como el de la gripe, según los especialistas.

Por eso el A (H1N1) debe ser vigilado atentamente, explicó Neal Cohen, epidemiólogo del Hunter College, en Nueva York. “Es posible que se dé una mutación en la estructura de este virus, y debemos estar atentos a eso. Tanto si muta o no, es posible que veamos un brote de este virus nuevamente en el otoño o invierno (boreales)”, aseguró.