“Mal día para pescar”
Cannes revela un nuevo talento del cine uruguayo
Alvaro Brechner es el director de un filme que introduce al espectador en una atmósfera épica. Está basado en un cuento de Juan Carlos Onetti.
María Carmona
AFP
Con “Mal día para pescar”, la Semana de la Crítica del Festival de Cannes reveló un nuevo talento del cine uruguayo, el director Alvaro Brechner, que introduce al espectador en una atmósfera épica, cercana al western, con una maestría rara en una primera obra. La película cuenta la historia de dos marginales europeos, Jacob Van Oppen (el finlandés Jouko Ahola), ex campeón de lucha libre, y su administrador, Orsini (el español Gary Piquer), estafador de maneras aristocráticas y aire mefistofélico, que se jacta de ser príncipe y organiza combates en los que ofrece mil dólares a quien pueda vencer a su campeón. Así sobreviven recorriendo Sudamérica, mientras alimentan sueños de tiempos mejores. Hasta que un día, en un pueblo llamado Santa María, una joven empuja a su hercúleo novio a aceptar el desafío. Por primera vez, Orsini teme que su campeón sea derrotado.
“Mal día para pescar” se inspira en el cuento “Jacob y el otro” de Juan Carlos Onetti, pero a partir de él Brechner creó su propio universo, un espacio fascinante fuera del tiempo, y sus propios personajes, pintando con humanidad su lucha contra el destino en una narración que atrapa por su ritmo, su ternura y su humor.
Pero en la película hay algo más. Como lo señaló el delegado general de la Semana de la Crítica, Jean-Christophe Berjon en la presentación de la obra, “el logro de Brechner es total porque no se contenta con el placer del ejercicio de estilo. Lo que da fuerza a la película es la profundidad de cada uno de los personajes, detrás de su grandilocuencia y de su dulce locura”.
Un gran objetivo
“ “Jacob y el otro’ es una obra maestra, pero cuando se adapta una obra al cine la pregunta para el director es qué tiene él que aportar. Si no puedes hacerla tuya, más vale no realizar la película”, declaró Brechner a la AFP al explicar cómo trabajó la obra, cuya realización le llevó cuatro años. “Mi gran objetivo era realizar esta obra sin que fuese deudora de la literatura, transformarla en algo cinematográfico. La atmósfera de western nos dio espacio para la cinematografía”, agregó.
Por lo demás, “Santa María es una ciudad imaginaria y cada uno es libre de imaginarla. La gente habla de la Santa María de Onetti pero en realidad cada lector hace su propia Santa María, y en mi caso es la Santa María de “Mal día para pescar’”.
Producción uruguayo-española, la película “ha llevado mucho tiempo y energía de mucha gente, tanto de España como de Uruguay. Yo mismo soy parte de los productores, porque las dificultades fueron tan grandes que tuve que buscar dinero por todos lados”. La ventaja es que “pude hacer la película como yo quería, no tengo a nadie a quien echarle la culpa”, añadió sonriendo.
Además del Premio de la Semana de la Crítica, en la que fue seleccionada, “Mal día para pescar” es candidata a la Cámara de Oro, el premio de Cannes destinado a laurear una primera obra de cualquiera de las secciones del Festival. Un galardón que sería ampliamente merecido.
