Décadas sin control dañaron las pesquerías

Pesca: expertos debaten qué

hacer con un recurso limitado

Los estudios coinciden: hay menos peces, son mucho más chicos y su hábitat está comprometido por numerosos factores. La explotación sin límites tiene consecuencias alarmantes.

De la redacción de El Litoral

[email protected]

Expertos de Argentina y Brasil, junto a funcionarios locales y pescadores participaron de un taller para discutir sobre el manejo de pesquerías, los límites a la sobre explotación del recurso, los efectos de las vedas, la posibilidad de procurar un repoblamiento de peces y de desarrollar la acuicultura como alternativa a la extracción.

El encuentro fue organizado por el Ministerio de la Producción y la Secretaría de Medio Ambiente y la Fundación Proteger.

Para el ministro de la Producción, Juan José Bertero, estas experiencias permiten “sociabilizar conocimientos para luego tomar las mejores decisiones: es importante que la sociedad nos vea trabajando juntos”, dijo ante un auditorio compuesto mayoritariamente por investigadores de nuestro país y el Brasil, funcionarios locales y de otras provincias y por ambientalistas y pescadores preocupados por la situación del recurso.

Los participantes decidieron formar un grupo de trabajo “para dar continuidad al debate sobre el futuro de la pesca en la Cuenca del Plata y como aporte en la implementación de planes de manejo”, según informó la fundación mencionada.

Regional

Encontrar cómo hacer del recurso una actividad rentable y sustentable en el largo plazo fue el eje del encuentro, en el que -además de Bertero- hablaron el secretario de Medio Ambiente, César Mackler; el secretario del Sistema Hídrico, Forestal y Minero Ricardo Biani; el director de Pesca Continental de la Nación, Mauricio Remes Lenicov; y el director general de la Fundación Proteger, Jorge Cappato.

La jornada buscó generar un ámbito para el análisis de las medidas de manejo actuales y nuevas propuestas para la gestión de las pesquerías en la Cuenca del Plata, así como, específicamente, conocer las experiencias de destacados especialistas de Brasil y Argentina. También participaron delegados de la Comisión Administradora del Río Uruguay (Caru), de Argentina y Uruguay.

Entre otros conceptos, Bertero dijo que “desde el punto de vista social, las comunidades pesqueras son consideradas un sector social marginal y esto también lo debemos revertir. Ver la inclusión a través de la producción, es un desafío al que todos nos debemos abocar: cuando hay cortes de ruta por parte de los pescadores, no es un problema de dos o tres, es un problema de todos los santafesinos”, advirtió.

Regulación o extinción

Miguel Petrere, especialista de la Universidad Estadual Paulista (Brasil), consultado sobre las vedas como una herramienta más entre las que buscan proteger el recurso pesquero, aseguró: “en base a lo que vemos en otras partes del mundo, todas las pesquerías que no son reguladas y reglamentadas, a mediano o largo plazo van a desaparecer”.

Dijo que además de vedas “el cuidado de las pesquerías requiere pensar y establecer regulaciones más allá de la pesca; lo primero sería parar de hacer grandes embalses”, es decir, lo contrario de lo que ocurre en Brasil, y del mismo modo evitar “la pérdida de hábitat de los peces, como por ejemplo los lugares para el desove”.

Menos y pequeños

Claudio Baigún, investigador de IntechConicet, revisó estudios de largo alcance sobre el estado de las pesquerías. Advirtió que desde que exportar pescado de río tiene alta rentabilidad, los cursos de agua han soportado cuanto menos el doble de lo que están en condiciones de dar. Puso en duda la efectividad de las medidas dispersas (como la veda que no es uniforme en la región) y comparó promedios de tallas de los concursos de pesca deportiva para mostrar que además de menos ejemplares, las piezas son cada vez más chicas.

Calificó a la situación actual como “un momento de transición y por lo que se ve en estas reuniones, la gente quiere repensar hacia dónde dirigir el manejo de los recursos”.

“Tenemos que definir qué tipo de pesquerías se quiere tener, qué tipo de ríos queremos tener. Pero no sólo en cuanto a la pesca, sino en temas ambientales importantísimos, como el agua. El Paraná está teniendo serios problemas con los niveles de agua y eso implica tener problemas con los peces”, indicó.

Crítica a la exportación

En relación a las administraciones provinciales Baigún expresó “hay que preguntarse si es un beneficio exportar miles de toneladas de pescados que comparativamente a otras producciones, son monedas. Porque antes de que existieran los frigoríficos la gente vivía igual o mejor. Los pescadores no aparecieron con los frigoríficos, estaban desde mucho tiempo antes. Todo eso se tiene que pensar y debatir, porque hay mucha gente que vive, trabaja, se educa, tiene alimento y salud porque todavía hay pesca”, remarcó.

/// ADEMÁS

El repoblamiento no sirvió en Brasil

Angelo Agostinho, de la Universidad Estatal de Maringá, Brasil, alertó sobre los problemas que puede conllevar el repoblamiento de un río a través de la introducción de alevinos. “Puede tener un alto riesgo para la población natural. Como primer paso se debe detectar si hay una real necesidad y efectividad del repoblamiento. En el alto Paraná en Brasil, hace 30 años que se está repoblando en los embalses y los resultados son negativos”, sintetizó.

“La experiencia brasileña de las últimas décadas sobre repoblamiento no fue muy animadora porque en la mayoría de los casos no hay relación entre el esfuerzo y el costo de repoblamiento y la poca o nula mejora en las capturas. Entonces hay muchas cuestiones que aprender, haciendo monitoreos y teniendo cuidado con lo que se va a sembrar, y las lecciones que dejan las experiencias de otros lugares”, añadió.

Además el repoblamiento puede tener muchos riesgos para la población natural. “Como primer paso hay que cuidar la genética”, insistió el experto y de inmediato destacó: “Ninguna medida de manejo debería ser tomada si no hay manera de monitorearla”.

1.jpg

Desde la exportación de peces de río, éstos han soportado cuando menos el doble de lo que podían dar, se dijo en el taller que atrajo a investigadores de Brasil.

Foto: Guillermo Di Salvatore

Control

El gobierno santafesino decidió crear tres puertos de fiscalización sobre la actividad pesquera, en Villa Constitución, Arroyo Seco y Pueblo Esther, que se suman a los existentes en Reconquista, Helvecia, San Javier y Fighiera.

Los puertos de fiscalización “son fondeaderos especializados en recibir embarcaciones de pesca comercial, que cuentan con los servicios necesarios para la recepción del pescado y el tratamiento, conservación y transporte del mismo”.

“Constituyen elementos esenciales en la explotación y conservación del recurso pesca, ya que son el primer eslabón en el control y fiscalización de la pesca comercial; aportan información que luego es utilizada para establecer programas de evaluación permanente; y constituyen una posibilidad de financiamiento para las comunas y municipios que lo gestionan”, dice un parte de prensa oficial.

Participantes

Entre otros investigadores, del taller sobre manejo de pesquerías, participaron Alberto Espinach Ross (Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero, Inidep), Norberto Oldani (investigador del Inteec-Conicet, Santa Fe); Daniel del Barco (director general de Manejo Sustentable de los Recursos Pesqueros, Santa Fe); Carlos Mariano Fuentes (Subsecretaría de Pesca y Acuicultura de la Nación); Alejandro Dománico (investigador, CIC-Inidep); Pablo Filippo (especialista en legislación pesquera); Sara Beatriz Sverlij (Grupo de Trabajo de Recursos Acuáticos, Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación); Jorge Liotta (director ejecutivo, Fundación OGA); Facundo Vargas (Dirección de Fauna, Parques y Ecología del Chaco); Danilo Demonte (Universidad Autónoma de Entre Ríos, Uader); Sebastián Sánchez (investigador, Inicne-Unne, Corrientes); y Juan Iwaszkiw (director de Fiscalización, Ministerio de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires).