Guadalupe Oeste

Asaltan y golpean a joven

que regresaba de estudiar

Ocurrió anoche en Risso al 2100. La víctima tiene 25 años y fue interceptada por dos sujetos que le robaron la cartera. La mujer sufrió heridas cortantes en el rostro, producto del forcejeo con los delincuentes.

Redacción de El Litoral

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Dramática experiencia vivió anoche una joven que fue víctima de un violento asalto callejero, en un hecho sucedido en Guadalupe Oeste.

Si bien la agresión se consumó en Risso al 2100, todo indica que la secuencia se inició a pocas cuadras, más precisamente en la esquina de Belgrano y Javier de la Rosa. Fue en la citada intersección que Paola Geordano (25) descendió de un colectivo de la Línea 10.

A partir de entonces, la mujer comenzó a caminar con dirección a su domicilio (Risso 2100) y fue cuando advirtió -aunque sin prestarle mayor atención- que detrás suyo se escuchaban algunas voces y pasos de personas.

Y lo peor no tardó en llegar. De repente escuchó que alguien decía, como una orden, “¡dale ahora!”. Para entonces sintió todo el peso de un individuo que, colgándose desde atrás, comenzó a tironear de la cartera de la joven.

Como consecuencia de esta acción, ambos cayeron al suelo. Pero allí se impuso la fuerza del rufián que imprimió más violencia a su ataque. Mientras la mujer intentaba defender sus pertenencias, el caco le propinó varios golpes de puño y patadas.

La refriega duró algunos segundos hasta que el malviviente se salió con la suya. Acto seguido fugó a bordo de una bicicleta, donde un compinche lo estaba aguardando.

Sobresaltados por los gritos, algunos vecinos y familiares se asomaron al exterior y fueron al encuentro de la chica. Poco después, varios patrulleros llegaron a lugar. Fueron los propios policías quienes solicitaron la presencia de una ambulancia.

El personal de emergencias brindó una primera asistencia a la joven en su domicilio dado que, como consecuencia del forcejeo con el rufián- había sufrido heridas cortantes en rostro y escoriaciones.

Arma reglamentaria

Por otra parte, tres delincuentes asaltaron ayer a un repartidor de lácteos en las calles de Barranquitas y se quedaron con su recaudación. El trabajador iba acompañado de un policía, quien no pudo ofrecer resistencia y terminó sin su arma reglamentaria como consecuencia del atraco.

El incidente tuvo lugar en inmediaciones de la esquina de Juan Díaz de Solís y Perú. Hasta ese lugar, llegó un repartidor de la empresa Milkaut a bordo de su camioneta Ford F-100, acompañado por un custodio uniformado.

Una banda de rufianes los sorprendió en ese cruce de calles y rápidamente puso fuera de combate al policía, quitándole la pistola reglamentaria. Con el arma de grueso calibre en su poder, los delincuentes le sacaron al repartidor lo que portaba de efectivo y luego desaparecieron de la escena.

Inmediatamente, las víctimas dieron aviso al 911 y se montó un operativo en toda la zona para dar con los asaltantes. Entonces, fueron apresados tres sujetos, uno de 30 años, otro de 19 y un menor de 15. La pistola 9 mm no apareció.

Fuentes oficiales de la Unidad Regional I sostienen que los detenidos reúnen las características aportadas por los asaltados.

Siete Jefes

En tanto, autores ignorados concretaron un robo domiciliario en una finca de barrio Siete Jefes.

El hecho ocurrió en la tarde del domingo en bulevar Muttis al 800 donde reside el veterinario Héctor Franicevich, junto a su familia.

A poco de regresar de un paseo, el profesional advirtió que la finca había sido visitada por los amigos de lo ajeno.

Desde una planta superior, los cacos se llevaron dos máquinas fotográficas, una notebook, una filmadora digital, joyas de la familia y dinero en efectivo.