Homicidio en Gálvez

En pago de una multa sangrienta

José Luis Pagés

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La policía santafesina busca a tres peligrosos delincuentes que en la madrugada de ayer mataron brutalmente al dueño de una whiskería de la ciudad de Gálvez y, ya sobre el mediodía, asaltaron, robaron y abandonaron atada de pies y manos a su segunda víctima, la dueña de un bar.

La clave de los sucesos que llenaron de alarma a los habitantes de Gálvez habría sido anticipada a un agente de seguridad por alguien que dijo saber de un muchacho que debió entregar un revólver 38 a tres individuos que llegaron para cobrar una multa.

El raid delictivo que ayer dejó por saldo la muerte Eliseo Esteban Tessio (57) se habría iniciado alrededor de la medianoche cuando tres hombres se presentaron ante un amigo y le exigieron la entrega de un revólver, precintos y cinta de embalar porque -dijeron- debían “cobrar una multa a “Patuto’ Tessio”.

Después que se armaron en el barrio Uom los integrantes del trío partieron a bordo de un automóvil VW de color rojo y un par de horas más tarde “Patuto” , dueño de una whiskería, llegaría al Samco local en compañía de un amigo, sólo para revelar el nombre del autor de la herida mortal que presentaba en el pecho.

Impuestos de la novedad -el cruento cobro de “una multa”-, los agentes de la comisaría de Gálvez salieron detrás de los asesinos pero nada supieron de ellos hasta entrada la mañana cuando uno de ellos -el nombrado por Tessio-, preguntó telefónicamente al dueño del revólver -el aparato ya estaba en poder de la policía-, cuál era el estado del herido.

La llamada habría sido rastreada y de ese modo la policía pudo orientar la búsqueda en dirección al oeste, presuntamente el asesino huía por rutas y caminos cordobeses.

Tras ello una comisión policial salió tras sus pasos, pero llegada la hora de cierre de la presente edición el curso que siguió la investigación y qué resultados arrojó la misma, es algo que dijeron desconocer las fuentes consultadas.

En cuanto a los restantes miembros del temible trío, estos parecen haber tenido otras intenciones diferentes del primero. Después de asesinado Tessio en su casa de Juan B. Justo 353, aledaña a la whiskería, habrían probado suerte asaltando a la dueña de un bar.

Cercano el mediodía de ayer otra comisión policial debió acudir a un local comercial de calle Ghandi sin número -el bar Galicia-, y en la casa vecina encontraron a la propietaria del establecimiento, Antonia Bossi, amordazada y atada de pies y manos.

Dos de los delincuentes que se armaron en la casa de barrio OUM, los mismos que tomaron parte del asesinato de “Patuto” Tessio en su whiskería de la calle Justo, fueron los mismos que se aprovisionaron y forraron sus bolsillos con los billetes del bar Galicia, antes de salir de Galvez con rumbo desconocido.

Con conocimiento de la Justicia competente la policía del departamento San Jerónimo trabaja en el caso con la colaboración de las restantes unidades regionales y sus pares de provincias vecinas, pero sin resultados a la vista, todavía.