Otra de poliladrones

La custodia se quedó con cuatro celulares

De la Redacción de El Litoral

Cuatro policías del Comando Radioeléctrico de San Jorge permanecen privados de la libertad, a raíz de una denuncia por el robo de cuatro celulares de alta tecnología, que aparecieron en su poder. Los uniformados habrían reconocido que sacaron los aparatos del negocio de telefonía cuando en realidad los llamaron para cuidar los bienes.

En realidad son cinco los imputados, y sólo uno de ellos se encuentra en libertad, puesto que el delito del que se lo acusa es menos grave que el del resto de sus compañeros. Los cuatro detenidos -tres varones y una mujer- son suboficiales oriundos de esa ciudad, ninguno de ellos mayor de 30 años, no tienen antecedentes penales y son de reciente ingreso en la fuerza, confirmó una fuente del caso.

El juez de Instrucción de San Jorge, Eladio García, los indagó ayer y ordenó su permanencia en la Alcaidía de la ciudad de Sastre, en la cabecera del departamento San Martín. Hoy continuaban con las medidas probatorias, de las cuales fueron de fundamental importancia los careos en que se incriminaron mutuamente, haciendo un velado reconocimiento del ilícito.

La investigación llevada a cabo por la División Judicial de la Unidad Regional XVIII y el juez García se inició el 21 de junio pasado, cuando la madrugada del domingo un muchacho se presentó en la comisaría para avisar que en el centro había una vidriera rota.

Como sonó la alarma, la dueña fue inmediatamente puesta en aviso y se acercó hasta el lugar, donde trabajaban cuatro uniformados que habían llegado en dos patrulleros.

La ocasión hace al ladrón...

Tal vez fue un frustrado intento de robo, quizás un hecho vandálico al azar. Lo cierto que la solicitud para que los policías se encargaran de la custodia del lugar, hasta tanto se encuentre a la persona que reponga el acrílico, fue la ocasión ideal para que los guardadores se tentaran con los objetos tecnológicos que estaban a su alcance. Además, bien podrían habérselos llevado quienes destrozaron el vidrio, supusieron los inexpertos funcionarios.

Pero tras arreglar la vidriera y revisar el material faltante, la dueña del negocio ubicado frente a la plaza San Martín, por calle Hipólito Irigoyen al 1400, advirtió que faltaban cuatro unidades de las más caras del mercado. Se trata de equipos con WI-FI y GPS entre otros servicios más sofisticados.

Entonces radicó la denuncia y pidió a las empresas de telefonía que los trataran de localizar. Con el número de Imei -International Mobile Equipment Identity- que es la identidad internacional que reconoce a cada equipo celular GSM del planeta, se pudo dar con cada uno de los equipos.

“La sorpresa fue muy grande cuando arribamos a quienes tenían los teléfonos activados” aseguró una fuente del caso. Y no era para menos, puesto que los mismos que debían cuidar el comercio tenían en su poder los celulares.

“Hurto agravado”

Tras cruzar alguna información con Operaciones Especiales de la policía del departamento San Martín, el juez Eladio García ordenó la detención e incomunicación de los sospechosos, así como el secuestro de los teléfonos.

En uno de los casos su portador no quedó arrestado dado que se lo habría comprado al autor del ilícito. No obstante también se encuentra imputado por el “encubrimiento”.

Los otros cuatro están acusados del delito de “hurto agravado” porque “son funcionarios públicos y se aprovecharon del estado de indefensión de la cosa”, adelantaron fuentes tribunalicias. Y por el momento seguirán bajo arresto “porque podría haber otras implicancias”, confirmaron.

Aunque no se descarta que sus defensores particulares soliciten la excarcelación una vez concluidas las medidas solicitadas por el juzgado, los policías no podrán volver a trabajar hasta tanto no haya un dictamen sobre el accionar delictivo que se les atribuye. Mientras tanto se tramita el pase a disponibilidad.

Cuatro policías del Comando de San Jorge permanecen detenidos acusados de “hurto agravado” .