Tuvo lugar el habitual brindis y fueron homenajeados quienes cumplieron 25 años de labor
El Litoral cumplió 91 años de presencia cotidiana
Este mediodía El Litoral celebró su cumpleaños con una sencilla ceremonia que congregó a descendientes de los fundadores, directivos, empleados y colaboradores para, en primer lugar, recordar a quienes fueron pioneros de la empresa y para agasajar a quienes cumplen este año ciclos significativos de trabajo en ella.
Redacción El Litoral
Para dar cumplimiento a una tradicional celebración, este mediodía se produjo en alto en las tareas habituales de cierre para poder dar paso al brindis con el que El Litoral festeja sus 91 años. En el marco de una nutrida presencia, la ceremonia dio comienzo con un minuto de silencio en memoria de los directivos y empleados fallecidos.
Para referirse a la conmemoración, habló a los asistentes el integrante del Consejo de Dirección, Dr. Gustavo Vittori quien resaltó la importancia del acuerdo con Clarín que concluyó con la constitución de AGL y, sobre este punto, explicó que “El Litoral no puede vivir aislado en tiempos de asociaciones; por lo tanto esta asociación estratégica con Clarín busca mayor respaldo, ser más fuertes, menos solitarios, más activos y con mayores perspectivas. La obsesión de quienes hacemos El Litoral es El Litoral, y todos los movimientos tácticos que podemos llegar a hacer están concebidos en función de la estrategia final de fortalecer a El Litoral”.
Señaló luego que en el terreno tecnológico se trabaja en “la puesta en marcha de un nuevo taller compartido en una asociación entre pares con AGR, una de las empresas del Grupo Clarín, que nos permite acceder a una tecnología que de otra manera sería imposible para nosotros. Esta tecnología nos permite dar un diario 100 % color, con capacidad de brindar respuestas contemporáneas al requerimiento de un mercado publicitario que pide color, y también a lectores que están acostumbrados a vivir ahora en un mundo de color. Por lo tanto, estamos correspondiendo a lo que son las demandas de la sociedad en la que vivimos, y ofreciendo un soporte mucho más interesante para todos los que trabajan en los aspectos visuales del diario: ya sean fotógrafos, ilustradores, humoristas, cuenten con un mejor soporte para mostrar su talento”.
Inversión en tecnología
Gustavo Vittori, en su discurso, agregó luego que “estamos próximos a comprar dos procesadores de planchas láser con una capacidad de producción que triplica la actual, y va a resolver uno de los embudos de la producción gráfica. Ganaremos tiempo en comercialización: hoy necesitamos tener una mayor cantidad de tiempo el producto ofrecido para que la venta dé mejores números”.
También anticipó algunas líneas de acción en otras áreas al destacar que “en la redacción vamos a empezar a avanzar ya con el programa de maquetado, lo que también nos va a permitir trabajar de una manera más ordenada: vamos a ganar en productividad, porque la asignación de los trabajos va a ser mucho más precisa, se va a evitar trabajo innecesario: todo se va a ajustar y beneficiar la productividad del conjunto”.
Vittori explicó luego que se trabaja, además, en el mejoramiento de los contenidos al señalar que “estamos incorporando contenidos como, por ejemplo, material para niños, que el diario no tenía desde hace muchísimos años; también una página especial sobre mundo tecnológico” y que “estamos ampliando la paleta de humor, porque el humor hoy es necesario en una sociedad tan conflictiva”.
Finalmente expresó que “estamos invirtiendo, estamos poniendo esfuerzo, tenemos una dirección; no nos inclinamos frente al evidente problema que manifiesta en el mundo occidental la prensa gráfica: vamos a resistir, no nos vamos a entregar...”, expresó.
Acto seguido se hizo entrega de las medallas de oro recordatorias al personal que cumple 25 años de antigüedad en la empresa. Silvia Villaggi de Vittori fue la encargada de entregar la medalla al fotógrafo Alfredo “Freddy” Heer; María José Lina Pilatti entregó otra a Alfredo Ceballos, corresponsal de Coronda; y Federico Caputto hizo lo propio con Rolando Villagra, jefe del taller publicitario.
