Los vampiros de Fred Vargas

(EFE)

La autora francesa Fred Vargas es considerada la “reina de la novela negra europea”, y entre sus temas preferidos está actualizar el “miedo a los vampiros”. La escritora, cuyo nombre verdadero es Frederique Audoin, declaró en alguna oportunidad que entiende a la literatura como “un medicamento contra la angustia”.

Su última novela es una historia de vampiros con una trama policial basada en la información que le dieron dos personas que “todavía creen en la existencia” de estos seres y que se sintió impulsada a escribirla por “puro divertimento” y para poner de manifiesto “el miedo de la gente ante cualquier superstición”.

A la autora parisina, cuyo apellido artístico “Vargas” ha copiado del personaje que interpreta Ava Gardner en “La Condesa descalza”, se la considera el máximo exponente de la literatura policiaca y de suspenso de Europa, tres de cuyas novelas ha publicado en castellano Punto de Lectura.

Sus libros, de claro estilo europeo, muestran “la cara más amable” de la literatura policial frente a lo descarnado de las obras de los autores estadounidenses, aunque en el fondo hablen de problemáticas similares. Vargas se manifiesta convencida de que toda la literatura puede sintetizarse en el planteamiento de un problema, de un conflicto, que encuentra una solución, en un esquema que necesariamente tiene que tener “musicalidad” para que funcione. Este sistema se adopta a todos los géneros; la diferencia radica en qué tipo de problema es el que abre el juego para que se desarrolle la historia y el resto son “etiquetas” que sirven para clasificar los libros en las estanterías de los comercios, sostiene.