SAN MARTIN, PROVINCIA DE BUENOS AIRES
Buscan a los homicidas del joven
asesinado en ocasión de robo
El padre de la víctima quedó parapléjico al recibir un balazo. Los delincuentes subieron al auto de la víctima, la obligaron a conducir hasta su casa y allí saquearon el lugar.
Télam/DyN
Los investigadores del crimen de Mariano Iannetta, ocurrido el miércoles en el partido bonaerense de San Martín, determinaron que los delincuentes que participaron en el hecho fueron cuatro y pretendieron quemar el auto del joven para borrar huellas, pero que no lo lograron porque apareció un patrullero.
En tanto, fuentes judiciales y policiales aseguraron que el padre del estudiante de Arquitectura y empleado municipal asesinado, Sergio Carmelo Iannetta (54), quedó parapléjico y permanece internado en “coma farmacológico” en una clínica.
Por su parte, el jefe de la Policía bonaerense, Juan Carlos Paggi, aseguró que es “muy optimista” con la posibilidad de que se esclarezca el homicidio y dijo que la fuerza tiene “la obligación de dar una respuesta social”.
En base a peritajes científicos y a declaraciones de testigos, los pesquisas establecieron que los ladrones que integraban la banda fueron cuatro hombres mayores y con antecedentes penales. Se cree que tres de ellos participaron activamente en el episodio, dos de los cuales ingresaron a la casa, y un tercero actuó como “campana”.
En tanto, el restante sería un partícipe necesario que llevó a los otros tres hasta el lugar donde se cometió el crimen y huyó al ver lo que ocurría, dijeron las fuentes.
Huellas dactilares
Según los investigadores, la clave para realizar la reconstrucción de los hechos fueron las huellas dactilares que se hallaron dentro del auto de la víctima (un Renault Clío negro) y en la casa de los Iannetta.
También resultó importante la declaración de testigos, uno de los cuales relató que cerca de la villa Las Ranas, en Villa Ballester, vio a un hombre que se acercó al vehículo, lo revisó e intentó encender papeles adentro con claras intenciones de prenderle fuego para borrar huellas. El incendio finalmente no se produjo por la aparición de un patrullero.
El crimen de Iannetta se produjo cerca de las 4 de la madrugada en su casa de Sáenz Peña 2969 de San Andrés.
Los investigadores creen que el muchacho regresaba a su casa a bordo de su auto y fue sorprendido por los ladrones, quienes se le subieron al auto y lo obligaron a conducir hasta la vivienda.
Una vez allí, ingresaron y despertaron al resto de la familia: su padre Carmelo, su madre y su hermana de 20 años, a quienes comenzaron a exigirles sus celulares y otros objetos de valor.
Por motivos que aún se desconocen, los delincuentes comenzaron a disparar contra Mariano, quien recibió cinco balazos, y su padre, quien fue herido de un tiro en el abdomen.
“Sufrió un daño en la médula que lo dejó parapléjico. Fue operado, pero su estado es muy delicado”, dijo un jefe policial, quien explicó que, además, el trayecto del balazo le provocó daños en el hígado.
Mientras tanto, los restos de Iannetta fueron inhumados en el cementerio municipal de San Martín ante más de un centenar de personas que acompañaron a la familia de la víctima en una caravana a lo largo de 10 cuadras.
Entre los concurrentes, se encontraban varios empleados de la Municipalidad de San Martín, donde trabajaba Ianetta, como así también integrantes del gabinete del gobierno municipal.
