Diego Tuosto en Regatas
Una propuesta diferente
Tuosto tuvo un buen pasaje en clubes locales, y participó en distintas selecciones provinciales y nacionales. Integró el Equipo de la Ciudad bajo las órdenes de Oscar Acosta.
Marcelo Mendoza
Diego Tuosto se reinsertó en el básquetbol local dando charlas a chicos y jóvenes del Club de Regatas, generalmente los días domingo. Con el ex basquetbolista, de aquilatada trayectoria, El Litoral mantuvo una amena charla.
—¿Cuál es la propuesta para con Regatas?
—Es una idea que venía pergeniando el “Negro” Roberto Van Lacke. Mis hijos hacen natación en el club y soy socio de Regatas. Desde hace varios años que soy invitado a dar charlas en diferentes clubes sobre el desarrollo técnico individual y contar las experiencias vividas.
El presidente del Club, Spagnoli, junto a Van Lacke, siempre me brindó un total apoyo, y salió esta posibilidad de hacer algo por el básquet. No soy director técnico pero lo que puedo hacer es transmitir todo lo que aprendí, lo vivido a través de los años y dárselo a los chicos. Parte es devolverle al básquet lo que el básquet me dio.
Me gustó la idea, retomé lo que Van Lacke había dejado y con él, que es un ejemplo para la juventud, comenzamos a trabajar. Todo sobre técnica individual y desarrollo de fundamentos. Ayudar al club, ayudar a que los chicos sigan mejorando, ayudar a los técnicos. A veces no basta con la hora y media de entrenamiento para trabajar todas las facetas que son necesarias para un jugador íntegro.
Llevamos algo más de un mes trabajando con una nutrida asistencia de chicos de todas las divisiones de Regatas. Los estamos haciendo los días domingos o cuando no hay actividad el fin de semana en el club.
Asisten aquellos chicos que ya tienen un gusto por el básquet y vienen a tratar de llegar lo más alto posible. Son preinfantiles, infantiles y cadetes.
—¿Diste charlas en otros clubes?
—Sí, en Libertad de Sunchales, en Deportivo Norte de Armstrong, por ejemplo. En la gran mayoría, invitado por amigos con los que he compartido gratos momentos jugando al básquetbol. El hecho de haber sido un jugador técnico, una de mis características, es una de las condiciones para que me hayan invitado para dar charlas, me ha sido de utilidad.
No tengo una amistad con Fede (Van Lacke) pero recibí con mucha alegría el haber sido invitado a su campus. Que un jugador de la trayectoria en nuestro país y en España como Fede se haya acordado de mí y dar una charla ante 80 chicos, es un honor.
Trabajo cómodo
—¿Tenés algún tipo de retribución?
—No, mi aporte es totalmente gratuito, sin ningún fin económico, es desinteresado. Después, si sale como propuesta laboral se verá. Por ahora esto último no lo tengo en mente. Quiero seguir aportando para el básquetbol. Me siento muy cómodo trabajando con los chicos. Cuando voy a ver algunas de las divisiones me alegra mucho el progreso de algunos de los jugadores por más chiquita que sea.
Los directivos del club me ofrecieron ser el coordinador del básquet, cargo que acepté. Hace alrededor de diez días que comencé. La idea es rearmar la subcomisión para que no haya padres que trabajen solos.
Regatas trabaja bien en divisiones inferiores. Mi presencia es dar más energía, ideas nuevas. Me propongo que los hicos crezcan a mediano y corto plazo, que los chicos tengan otro tipo de competencias a modo de incentivación para que no emigren.
A veces el torneo local se hace monótono. Ya se sabe con quienes jugás, conocés muy bien al rival.
La participación en otro torneo significa erogación pero creo que con organización y buscar recursos se puede lograr. Material humano hay tanto en lo deportivo como en apoyatura de padres y dirigentes.
—¿Qué tipo de enseñanzas les das?
—Cuando volví a ver básquetbol me encontré con chicos que juegan rápido, desde premini a juveniles. Antes no era así pero había más técnica. En ese entonces, el básquet era un tanto más vistoso. La idea es explotar la técnica que tiene cada jugador para sumársele a la velocidad. Me lleva mucho tiempo preparar las charlas pero lo hago con gusto. Conversando con padres, se dijeron sorprendidos que les llamó la atención el hecho de que no haya partidos y que los chicos estén concentrados en las explicaciones que daba.
La diferencia que tenemos con los técnicos es que nosotros los tenemos a los chicos, y puntualizamos las cosas, en cambio ellos tienen que planificar los entrenamientos para enfrentar a un rival. En definitivas, aporto mi granito de arena para, como te dije anteriormente, devolverle al básquet parte de lo mucho que me dio.
