Los estilos del nuevo periódico

Julia R. Arévalo

(EFE)

Con audiencias saturadas de información, sólo un periódico mejor escrito, con menos historias pero originales y en profundidad, puede sobrevivir a la crisis de la prensa, según un estudio presentado en un congreso en la ciudad india de Hyderabad.

“Innovarse o morir” es la conclusión del último Informe Global sobre Innovaciones en los Periódicos, que pone como modelos de diarios para la nueva era al brasileño Correio, el francés Liberation o el portugués I.

“El periódico permanecerá pero necesita nuevos contenidos”, aseveró Juan Señor, vicepresidente de la consultora que hizo el estudio presentado a los congresos de la Asociación Mundial de Periódicos y del Foro Mundial de Editores concluido en Hyderabad.

Señor expuso que la prensa ha actuado hasta ahora “a la defensiva”, optando por el cierre o el recorte de gastos “hasta el sangrado” para capear la crisis, en lugar de “reinventarse” para atraer a “audiencias que den beneficios”.

“La audiencia quiere criterio editorial” para comprar un periódico, pero la oferta son primeras páginas prácticamente idénticas sobre noticias que ya conocen del día anterior y que no le prometen una mirada más analítica, describió.

Según el estudio, los periódicos que están funcionando han desterrado el corsé de las viejas secciones y apostado por nuevas estructuras, con menos noticias o historias a las que dedican más espacio.

El lector de la nueva era demanda una “nueva narrativa”, un tratamiento objetivo y mucho más profundo, un equilibrio entre las historias positivas y negativas, y que su periódico sepa descubrir “qué es relevante en su comunidad” y hacérsele cercano.

“No los quieren para cambiar el mundo sino para ver el mundo”, según una encuesta presentada en una sesión conjunta de los congresos en Hyderabad que revela que el lector está cansado de periódicos sesgados por su orientación política.

Según el sondeo, desarrollado en los Estados Unidos, España y otros cuatro países europeos -países en los que baja o se resiente la circulación-, “la objetividad nunca ha tenido tanta importancia como ahora” para el lector.

La revolución hecha por Liberation sirvió como ejemplo de “reinvención” de un periódico “fracasado”, según lo describió su director de Innovación, Andrew Jaspan. “Es un periódico que ha vuelto a ser chic”, afirmó Señor. “Había que bajar su volumen del grito al susurro” y abandonar la retórica por la dialéctica, abogando por un periodismo sostenible” que deje de ser rehén de los resultados de cada trimestre o semestre. Este nuevo diario, necesariamente insertado en una propuesta multimedia, requiere tanto una redacción como una dirección integradas, con Internet como núcleo.

Pero la integración, advirtió, no consiste en tumbar muros y cooperar, sino que “tiene que hacerse radicalmente”. El análisis de Señor asevera que los periódicos han cometido un gran error al replicarse en la web, cuando cada plataforma necesita un contenido y una imagen distintos. El papel es a la versión digital, dijo, como la alta costura al pret-a-porter.

Señor aseguró que este periódico “reinventado” ha demostrado tener capacidad de subir su precio y, aún así, atraer a nuevos lectores y aumentar la cota de ingresos por circulación en estos tiempos de pérdida de publicidad.

“El periodismo único siempre vende”, dijo, para proponer que el periódico se “convierta en una revista diaria” y admitir que, en algunos casos, “tendrá que cambiar su frecuencia”.

Para las versiones digitales, Señor sugirió rediseñarlas con contenidos adicionales que sí puedan ser de pago: aquellos que ofrezcan un valor añadido como el análisis, la foto de archivo o herramientas útiles para el cliente.

El mensaje de Señor, que apuesta por rentabilizar los contenidos, contrastó con otras propuestas de los últimos tres días en Hyderabad que abogaban por nuevas vías de negocio como la venta de productos y servicios a través de las versiones digitales, aprovechando la imagen de marca de confianza consolidada por los viejos diarios a lo largo de su historia.