El entrenador de Boca sigue de festejos
Alves tuvo su desquite
“Ojalá que todos los rivales tengan el color rojo y blanco”, tiró el DT en conferencia de prensa. También devolvió los “palos” que recibió en este tiempo.
Redacción de El Litoral
Télam
Abel Alves expresó su felicidad por el triunfo en el clásico ante River por 2-0, en La Bombonera, e ironizó al señalar: “Ojalá que todos los rivales tengan el color rojo y blanco. El jugador de Boca se transforma cuando ve esos colores”, disparó el entrenador “xeneize”.
El técnico volvió a hablar en conferencia de prensa después de dos semanas, luego del entrenamiento que el plantel realizó en el predio de Casa Amarilla, el día después del gran triunfo por 2-0 en el superclásico en la Bombonera, con goles del chileno Gary Medel.
En su reencuentro con los medios, Alves le dedicó el triunfo a todos lo que sintió que lo apoyaron en los malos momentos que tuvo el equipo en las fechas anteriores del Torneo Clausura.
“Le dedico el triunfo a los plateístas, a La 12, a los directivos que me han bancado siempre y a todos los que estuvieron conmigo en estos momentos difíciles”, señaló.
No se olvida
Alves se acordó también de las críticas que recibió en toda la previa al superclásico ante River.
“Recibí palos muy graves y me dolieron mucho algunas críticas sin fundamentos, porque ser técnico de Boca es una de las más grandes bendiciones que me dio Dios”, sentenció.
“Hubo muchas cosas que se dijeron que me han dolido, cosas que no eran ciertas, como que no tenía huevos y que me quedaba grande el saco de entrenador de Boca”, agregó.
“Quiero decirles que lo que me sobran son huevos y no me va a parar nadie. De acá, me van a sacar con los pies para adelante. Me voy a ir de Boca ganador, pero les aseguro que nunca pensé en renunciar”, completó.
Con otro ánimo
El triunfo de Boca cambió el semblante de Alves, a quien en la previa se lo notaba abatido y sabiendo que una derrota ante River lo iba a dejar fuera del cargo que por ahora sigue ocupando en la entidad de la ribera.
Asimismo, desmintió las versiones que corrieron sobre una supuesta intención de “borrar” del superclásico a los históricos Palermo y Riquelme.
“Martín y Román son una institución dentro del club, no sé de donde salieron esas cosas”, explicó el técnico de Boca.
Sobre su decisión de incluir a Ezequiel Muñoz como lateral derecho y hacer debutar a Matías Jiménez, nada menos que en un superclásico, Alves se tomó un tiempo para dar los motivos.
“En la vida siempre hay que correr riesgos”, y afirmó que estaba seguro de que Muñoz podía rendir en cualquier puesto de la defensa “porque tiene las características y el temperamento que debe tener el jugador de Boca”.