Cuestionan la votación

Mientras amenazan con el veto presidencial o acciones judiciales, interpusieron un recurso administrativo en el Senado y presionan a Fellner.

De la redacción de El Litoral

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DyN

El jefe del bloque de diputados del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, confirmó hoy que el oficialismo buscará evitar el tratamiento de la reforma del impuesto al cheque en Diputados y advirtió que la Cámara Baja “no puede convertirse en cómplice de la violación de la Constitución”.

Tras la intensa polémica que generó la media sanción de ese proyecto en el Senado -cuestionada en su validez por el oficialismo-, Rossi volvió a embestir duramente contra el vicepresidente Julio Cobos, a quien acusó de “terminar siendo un empleado de los senadores (radicales Ernesto) Sanz y (Gerardo) Morales”.

Al reiterar sus críticas a la aprobación de la Cámara Alta a la reforma del impuesto al cheque, alertó que “se rompieron las reglas de juego en el Parlamento argentino. Vamos a impedir que la Cámara de Diputados se convierta en cómplice de lo que pasó en el Senado”, avisó el diputado kirchnerista, en declaraciones a radio 10.

Insistió en que “la Cámara de Diputados no puede convertirse en cómplice de la violación de la Constitución, eso está absolutamente claro, y creemos que en algún momento hay que poner un límite, porque esto no es lo primero que pasa, es lo más grave”.

Rossi señaló que una vez que los legisladores “recibamos ese expediente girado por Cobos, que no es una media sanción”, él mismo se va a encargar de solicitar “a los presidentes de los bloques opositores que reflexionen de la misma manera” y no traten la iniciativa, a la que volvió a considerar “inválida”.

Recurso

En este escenario enrarecido, el jefe del bloque de senadores oficialistas, Miguel Pichetto, presentó ayer ante Cobos un recurso administrativo para que declare que la votación “no alcanzó la mayoría absoluta”. Por lo tanto, añadió Pichetto, “no quedó aprobada” la iniciativa por no respetar criterios constitucionales.

El senador también pidió que se abstuviera de remitir el texto a Diputados, pero para el momento en que el texto ingresó por Mesa de Entradas -a las 18.40-, Cobos ya había enviado a la Cámara Baja el proyecto con media sanción”, razonó el senador Ernesto Sanz, titular de la UCR. Pichetto remitió también una carta el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Fellner, en el que informó del recurso presentado en el Senado y que el proyecto sancionado “no alcanzó la mayoría absoluta y no quedó aprobado” por la Cámara Alta.

En el recurso, Pichetto argumentó que Cobos “en lugar de hacer cumplir la Constitución Nacional y el reglamento de la Cámara, sometió a votación la cuestión con respecto a qué mayoría se necesitaba”.

“Se llegó al absurdo que una simple mayoría de los presentes logró eludir el requisito exigido por la norma constitucional (artículo 73, inciso 3), según el cual toda modificación de una ley de esa naturaleza requiere ser aprobada por la mayoría absoluta de los miembros totales del cuerpo”, señaló.

Pichetto afirmó que “este hecho constituye un precedente de alta peligrosidad ya que posibilitaría que una mayoría simple pueda desconocer la exigencia de mayorías especiales”. El texto de Pichetto abunda en argumentos legales sobre la necesidad de que la Cámara de Senadores tuvieran la mayoría especial (37 votos) en vez de una de tipo simple (los 35 que logró la oposición).