Investigadora del futuro

Investigadora del futuro

Silvia Albornoz

De paso por su ciudad natal, esta doctora en Biología Computacional explicó cómo su capacitación permanente le permitió llegar a Estados Unidos, donde está trabajando desde hace años aplicando los procesadores a la Medicina y la Biología.

TEXTOS. MARIANA RIVERA. FOTO. MAURICIO GARÍN.

SANTAFESINA DE ORIGEN. “Soy investigadora nacida y criada en Santa Fe, pero estoy en Estados Unidos desde hace casi 24 años. Me recibí en Santa Fe de licenciada en Matemática y allá hice un doctorado en Ciencias de la Computación. En él estudié el uso de máquinas paralelas, muy rápidas; son muchos procesadores trabajando al mismo tiempo, que necesitan programación especial para que funcionen óptimamente. Decidí que quería buscar un buen uso para lo que yo sabía y, como siempre me interesó la Medicina y la Biología, hice un posdoctorado en Biología Computacional. Realmente me enamoré del tema, porque es apasionante. Y éste es el mejor momento para trabajar en el área de Biología Computacional”.

APLICACIONES PRÁCTICAS. “Usamos computadoras para modelar lo que está pasando, por ejemplo, a nivel celular o molecular y, algún día llegaremos a crear un modelo de cómo funciona un órgano. Es algo muy difícil, y no sé si lo voy a alcanzar a ver. Es el uso de las ciencias de la computación -no sólo de las computadoras, sino también de visualizaciones y algoritmos- para tratar de ver si uno puede representar lo que está pasando a nivel celular o de un organismo, no solamente humano. La célula en sí es compleja, tanto la humana como la de cualquier organismo más pequeño. Tienen ácido ribonucleico (ARN), una cantidad de proteínas que trabajan en asociación para producir cosas. Son los componentes principales del organismo. Que las proteínas funcionen y hagan lo que tienen que hacer, es esencial para que nosotros estemos sanos. Son una especie de cadenita de perlas, que son producidas por el ARN. Ésta es esencial y, si por algún motivo falla, estás enfermo de Alzheimer, Parkinson o cáncer. Modelar (representar con la computadora) solamente lo que está haciendo la célula ahí, es complejo. Por eso es que se usa una conexión entre máquinas paralelas, y estamos viendo si podemos hacer la representación de esta fábrica que está todo el tiempo trabajando”.

INVESTIGACIÓN ACTUAL. “Por mucho tiempo se desarrollaron las drogas para medicamentos a partir de determinar cuáles son las posibles proteínas que están envueltas en una enfermedad. Siempre existen varias sospechosas, pero se puede determinar una que esté más comprometida. Las proteínas son como unos ovillos de lana que tienen unas cavidades y salientes que usan para asociarse. Cuando se conectan, trabajan juntas y cumplen una cierta función. Si algo anda mal o uno no quiere que se produzca esa conexión porque enferma, se debe diseñar una droga que va a ir en esa cavidad para que no se conecten. A ese proceso se lo denomina blocker, es decir, bloquea para que no haya conexión. Este es el mecanismo usado hasta hoy, pero no funciona bien porque hay otras proteínas que tienen la misma forma. Cuando vos tomás un remedio, no está diseñado para ir solamente a esa proteína sino al cuerpo: la sangre lo distribuye a muchas células que no son ésas, que tienen otras proteínas con las mismas formas. Ahí es cuando se producen los denominados efectos secundarios de los medicamentos, como náuseas, vómitos o dolores de cabeza”.

NUEVA MIRADA. ““La idea de esta investigación es encarar el problema de otra manera: en vez de mirar solamente a esta proteína miramos a todas las que están conectadas con ella. Si tienen la misma forma probablemente son candidatas a ser bloqueadas por esta droga. Si uno pudiera hacer esto, podríamos ganar mucho tiempo y dinero, ya que desde el momento en que se empieza a diseñar una droga hasta que sale al mercado pasan 10 a 15 años y se gastan 800 millones de dólares por año para producir una. La idea es empezar a usar computadoras para poder modelar ésto, mirando al sistema de manera global y no solamente a la proteína, para poder detectar la solución a tiempo. Ésta es una aplicación en Medicina y es una de las cosas que estamos haciendo ahora en la Universidad de California, Berkeley. La idea es poder ir desde lo más detallado a lo global y ver si funciona bien o no, sin tener siquiera que tocar a una persona; todo con una computadora. A futuro, tu médico tendrá tu ADN en la computadora, sabrá cuál es la composición de proteínas y definirá cuál es la mejor medicación y la dosis indicada para vos, sin afectar al resto del organismo. Será completamente diferente para otra persona y se evitará el efecto secundario. Por ejemplo, a una persona que le tienen que hacer un tratamiento de quimioterapia no le tendrán que dar una excesiva cantidad porque quizás no lo necesita. Todo esto algún día se va a poder hacer, gracias a que vamos a tener modelos en computadoras que nos van a dar respuestas rápidas a estas preguntas”.

TRABAJO EN EQUIPO. “Estas investigaciones son el producto de trabajo de equipo. El investigador ya no trabaja más solo sino que tiene que tener gente que hace computación (entre ellos, visualización, algoritmos, datos), biólogos, médicos, ingenieros, entre otros. No sólo estamos tratando de ver Biología de manera integral, sino que nosotros mismos, los científicos, nos estamos asociando para encontrar soluciones”.

así soy yo

MUJERES INVESTIGADORAS

“Siempre está la idea de que es más difícil para la mujer tener una profesión, ya que tiene que hacerse cargo de los hijos y tiene responsabilidades en la casa, además de competir con hombres que no tienen todos estos problemas. Es complicado, pero se puede. Tengo tres hijos: uno nació acá y lo llevé de bebé a Estados Unidos cuando hicimos con mi marido el doctorado. Cuando terminé el doctorado ya tenía dos hijos y fue bastante bravo. Pero, si yo pude, se puede; cualquiera puede”.

IGUALDAD DE OPORTUNIDADES

“Integro un comité del Departamento de Energía de Estados Unidos que otorga becas a los mejores estudiantes. En este grupo defiendo a las mujeres y a los latinos. Son 20 becas para todo el país y siempre me peleo con los demás para que haya más mujeres y más latinos, de manera que el grupo sea más representativo. No hay muchas mujeres en este área de computación; todavía en Estados Unidos hay un 25% de mujeres que salen de los programas de doctorado, pero quiero que lleguemos al 50 y 50. También pretendo que haya una gran representación de estudiantes latinos porque hay muchos en EE.UU., para que sirvan como modelos de otros chicos que no se deciden a estudiar estas carreras, de manera que vean que hay personas que llegaron. Yo crecí en un barrio humilde, fui a la Escuela Colón y a la de Comercio de Santa Fe y, sin embargo, pude llegar. Por eso, muchas otras personas también pueden lograrlo”.