¿Nada cambia?
Desafíos después del canje
La aceptación de 66 por ciento lograda en el canje de deuda en default “es un número razonable” aunque “nada cambia” financieramente en el corto plazo para el país, dado que aún está entre las naciones “riesgosas” para los inversores, advirtieron varios economistas.
El ex secretario de Finanzas Miguel Kiguel opinó que “el resultado es razonable” pero aseguró que “Argentina sigue siendo, entre de los países emergentes, uno de los más castigados en términos de tasas de interés. Un objetivo del canje era despegar de los países más riesgosos, y eso por ahora no se logró.
“Vamos a ver si se logra, lo veo complicado porque hay mucha incertidumbre respecto de la agenda económica y financiera del país”, evaluó. Dijo que “a nivel doméstico no hacemos los deberes que hace falta”, y citó como ejemplo el descrédito del Indec.
En la misma sintonía, el economista jefe de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (Fiel), Daniel Artana, reconoció que “es una buena noticia” el resultado del canje, pero estimó que “no cambia nada”.
“Está bien y es el principio de ir resolviendo un problema. Pero no se resuelve todo el problema, porque queda un 10 por ciento (de acreedores) afuera”, mientras que para Argentina “la tasa de endeudamiento sigue siendo de dos dígitos”.
A su criterio, en el corto plazo, el gobierno deberá “mejorar la cuentas fiscales para no tener que endeudarse”, y explicó que “eso puede bajar la tasa (de interés) y hacer que Argentina entre en un proceso virtuoso”.
Por su parte, el analista Ramiro Castiñeira, afirmó que “salir de la tragedia del default es un dato positivo”, aunque consideró que el gobierno no debe cerrar definitivamente la puerta a seguir negociando con los inversores que no ingresaron al canje.
El economista planteó: “Hay que dejar una puerta abierta, seguir invitando a quienes se quieran sumar, para que la única instancia que haya no sea la judicial, más si son inversores minoristas”.
Asimismo, destacó que “hay que procurar arrancar la negociación de la deuda con el Club de París”, y aseveró que dar ese paso “es importante, sobre todo en un contexto, donde se sigue perdiendo superávit fiscal, y necesita financiamiento para garantizar el pago de la deuda”.
A su vez, el analista de la banca de inversión Puente, Fernando Pesci coincidió que el nivel de adhesión al canje “es razonable”, y resaltó que salir del default “es positivo para Argentina porque es un paso más para prepararse a colocar deuda cuando los mercados de capitales se tranquilicen”.
