Caso Juan Aníbal Ferreyra

Se presentó por un robo y quedó pegado a un crimen

El imputado es un joven de 22 años. En las próximas horas prestará declaración indagatoria ante el juez De la Torre.

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La muerte de Juan Aníbal Ferreyra enlutó a todo el ambiente del turf donde era sumamente querido y respetado. Foto:El Litoral

 

Redacción de El Litoral

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Ayer a la tarde un joven llegó hasta los Tribunales locales, acompañado por un abogado.

Su estrategia consistía en dar la cara por un hecho de robo calificado (asalto), donde se encontraba como principal sospechoso.

Pero a poco de comenzar los trámites de rigor, su plan se derrumbó como un castillo de naipes: quedó detenido e imputado por un resonante caso de homicidio.

Principio del fin

Eran cerca de las 17 cuando Nicolas A. subió las largas escalinatas del edificio de calle San Jerónimo 1551.

Iba tranquilo y confiado. Lo acompañaba un abogado que desde hace algún tiempo oficia también como consejero. Juntos se presentaron ante el juzgado de instrucción de la 6a. Nominación, a cargo de Sergio Carraro. La intención era “limpiar” el campo ante un hecho de robo donde “el cliente” se encontraba supuestamente involucrado.

Como es de rutina se ordenó su identificación. Y fue el principio del fin.

Para esta parte comenzó a jugar en la historia el Gabinete de Identificaciones de la URI. Fue allí donde “saltó” que sobre el sujeto en cuestión pesaba un pedido de captura por encontrarse como principal sospechoso de la muerte de Juan Aníbal Ferreyra.

Con la urgencia del caso la novedad fue comunicada al juzgado de instrucción de la 7a. Nominación (donde está la causa Ferreyra), cuyo titular ordenó la inmediata detención del individuo.

Al cierre de esta edición Nicolás permanecía alojado en dependencias de la seccional 4ta. en calidad de detenido y comunicado.

Se cree que durante la mañana del jueves podría prestar declaración indagatoria ante el juez que lleva adelante la causa.

Según se supo agentes de la división Homicidios en las últimas horas habían aumentado la presión contra el acusado, concretando una serie de allanamientos en jurisdicción de Alto Verde y Villa Hipódromo.

Por una bicicleta

El nombre de Nicolás A. quedó “pegado” al crimen de Ferreyra a partir de los dichos de muchos testigos que vieron el cruento suceso.

El repudiable episodio criminal ocurrió el 26 de octubre a media tarde en pasaje Santa Fe y Pedro de Vega, y tuvo un desenlace fatal 24 horas más tarde.

Juan Aníbal Ferreyra regresaba a su casa ubicada frente a la rotonda de avenida Blas Parera cuando fue asaltado y brutalmente castigado al retener la bicicleta que le querían arrebatar.

Con la culata de un arma, el asesino descargó sus golpes con tal brutalidad que Ferreyra se desplomó con el cráneo partido y otras gravísimas lesiones.

Ferreyra era considerado un hombre ejemplar. Tenía toda una vida vinculada al ambiente del turf donde se jubiló como el más antiguo “cuidador de caballos carreras” en el hipódromo santafesino. Fue padre de siete hijos.

A través de su extensa trayectoria, supo ganarse un enorme respeto y cariño entre sus pares.