Nadie vio nada
Murió un adolescente que fue baleado en la cabeza
El asesino ultimó a la víctima con un disparo efectuado a corta distancia con una pistola 9 mm.
Los agentes que inspeccionaron el lugar encontraron una cápsula servida, único indicio orientador de la pesquisa.
Foto: Luis Cetraro
José Luis Pagés
Un joven de 17 años murió anoche en el hospital provincial Dr. José María Cullen, nosocomio al que había ingresado a media tarde con una herida de bala en la cabeza.
Mariano Ramón Zenteno fue alcanzado por un proyectil en el marco de un confuso incidente que se suscitó a las 18 en Monseñor Zazpe y San José.
Agentes de la Seccional 2a. -dependencia de la URI que tiene jurisdicción en la zona- acudieron al llamado de los vecinos y encontraron que el muchacho yacía inconsciente en la vereda.
La gravedad del cuadro decidió la inmediata intervención de los peritos policiales, también se hizo presente el Sies 107, con una ambulancia a cargo de un médico neurólogo.
No obstante la celeridad con la que imprimieron al operativo y la profesionalidad con la que actuaron los servidores públicos no se pudo salvar la vida de Zenteno, quien falleció como consecuencia de las lesiones cerebrales causadas por el proyectil que ingresó por su ojo izquierdo.
En el lugar del hecho, los agentes que trabajan para la policía científica de la URI realizaron los peritajes de rutina y secuestraron la cápsula servida que habría sido despedida por la pistola -una 9 mm- arma que habría sido esgrimida contra la víctima.
A pesar de la hora en la que se desarrollaron los hechos que terminaron con la vida de Zenteno, nadie -entre los transeúntes ocasionales o vecinos- aportó datos de interés a los investigadores.
Algunas personas habrían dicho que no observaron nada relacionado con el crimen y que recién supieron de lo ocurrido cuando, asomados a la calle, descubrieron que la víctima agonizaba en la vereda.
Los estampidos
Las versiones circulantes parecen indicar que fueron los estampidos de un arma de fuego los que atrajeron la atención de los vecinos, al menos dos estampidos que no pueden dejar de asociar al ruido que produjo una motocicleta que partió a gran velocidad.
De allí en más poco y nada se sabe acerca del autor del disparo. En resumen, Mariano Ramón Zenteno -quien recién pudo ser reconocido después de su muerte- fue baleado por un desconocido que accionó una pistola 9 mm y escapó de inmediato a bordo de una motocicleta.
Finalmente cabe destacar que las actuaciones sumarias comenzaron en la Seccional 2a., pero anoche fueron derivadas a la Sección Homicidios de la Unidad Regional I.
