El crimen del country

Familiares de María Marta serán juzgados en abril

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María Marta García Belsunce, sólo el viudo Carrascosa está preso por su muerte. Foto: Archivo.

Hay fecha para juzgar a familiares y allegados a la víctima, como otros involucrados en la misteriosa historia iniciada en 2002.

 

DyN

El segundo juicio por el encubrimiento y el crimen de María Marta García Belsunce comenzará el 4 de abril próximo, según dispuso hoy el tribunal oral de San Isidro que llevará adelante el debate.

Allí los acusados serán el cuñado de la víctima, Guillermo Bártoli; sus hermanos Horacio García Belsunce (h) y John Hurtig y el padre de este último, Constantino Hurtig.

También serán enjuiciados la masajista Beatriz Michelini, el médico Juan Gauvry Gordon y un vecino del country donde ocurrió el homicidio, Sergio Binello.

Precisamente, tres de los que ahora irán a juicio habían pedido la “probation’, es decir, aceptar la culpa a cambio de realizar tareas comunitarias, con tal de no enfrentar al tribunal.

Ellos fueron la masajista, el médico y el ahora potencial principal sospechoso para la Fiscalía, Bártoli, quien dijo haber estado a la hora del crimen junto a Carlos Carrascosa, el viudo ya condenado primero por el encubrimiento y luego por el homicidio de la socióloga.

Sin embargo, el pedido de “probation’ fue rechazado por la Fiscalía en noviembre pasado y ahora los jueces del Tribunal Oral Criminal 1 de San Isidro pusieron fecha a la primera audiencia: el 4 de abril.

Los encargados de esclarecer la responsabilidad que tuvieron o no los imputados serán los jueces Alberto Ortolani, María Elena Márquez y Ariel Introzzi Truglia.

Todavía sin embargo no está claro quién llevará adelante la acusación, pero se descuenta que en el caso trabajarán los fiscales de Pilar Leonardo Loiterstein y Daniel Márquez.

El crimen de María Marta García Belsunce, ocurrido el 27 de octubre de 2002, sigue siendo un misterio. Aunque el viudo Carrascosa fue responsabilizado por el Tribunal de Casación bonaerense como responsable del homicidio, todavía quedaron puntos oscuros en el caso y la Fiscalía no descarta ampliar la acusación como coautores a alguno de los imputados en el segundo juicio.

María Marta estuvo en una reunión familiar, pero salió en bicicleta rumbo a su casa porque estaba por venir su masajista a las 7 de la tarde de ese domingo; antes de su llegada quería darse un baño.

La masajista llegó unos minutos después, cuando Carrascosa le gritaba para que subiera porque María Marta había tenido un accidente: la estaba sacando de la bañera, donde, al parecer, había resbalado producto de su habitual torpeza, y se había golpeado la cabeza.

Dos ambulancias llegaron al lugar y los médicos confirmaron que estaba muerta; uno de ellos recomendó una autopsia, pero se prefirió evitar las complicaciones; se llamó una casa velatoria que certificara un fallecimiento por “paro cardiorrespiratorio no traumático” y se organizó el velatorio en la casa del country de Pilar donde había ocurrido el hecho.

Además, apareció un objeto extraño en el baño que un grupo de la familia resolvió tirar en el baño: resultó ser la sexta bala que le habían disparado a María Marta y que había rebotado en su cabeza, que se conoció inicialmente como “pituto’, en alusión a un sostén metálico de estantes.

Recién un mes y medio después se confirmó que la mujer tenía cinco tiros en la cabeza. Fue luego de una autopsia que dispuso el fiscal Diego Molina Pico tras tomarle declaración al segundo médico que asistió al lugar, ante la sospecha de haber sido engañado por la familia.