EL BARRIO NO TIENE AGUA DE RED
La Defensoría del Pueblo intervino ante reclamos de vecinos de Acería
Las malas condiciones edilicias del complejo habitacional representan una queja de larga data por parte de la vecinal Juana Azurduy. La Defensoría del Pueblo pide que el barrio sea conectado a la red de agua potable.
La intersección de pasaje Roca y Cafferata es el principal punto de referencia a la hora de localizar el emplazamiento del complejo habitacional de barrio Acería. Foto: Archivo El Litoral/ Amancio Alem
De la Redacción de El Litoral
La situación edilicia del complejo habitacional de barrio Acería y la imposibilidad de acceder a la redes de agua potable y cloaca llegó al ámbito de la Defensoría del Pueblo, luego de que las autoridades de la vecinal Juana Azurduy realizaran en abril de este año una presentación.
Catalina Frías, presidenta de la entidad barrial, manifestó a El Litoral que se acercaron al organismo dedicado a proteger los derechos fundamentales del individuo y los intereses difusos o colectivos de la comunidad ya que “las innumerables” notas presentadas en la Dirección Provincial de Vivienda así como los pedidos de audiencia a distintos funcionarios gubernamentales “jamás tuvieron efecto”.
Consultada sobre la situación edilicia del complejo habitacional conformado por 22 monoblocks, la vecinalista indicó que se encuentra en un estado calamitoso. “Todos los vecinos están asustados. Temen que en cualquier momento se produzcan derrumbes ya que, por ejemplo, las pasarelas y las escaleras están todas fisuradas”, describió.
Catalina Frías recuerda que el complejo se inauguró en el año 1987, bajo la promesa de la realización de constantes tareas de mantenimiento porque su vida útil no sería por muchos años. Sin embargo, aclaró que dichos trabajos nunca se concretaron.
Sobre el acceso a la red de agua potable, indicó que los caños pasan a 100 metros del complejo pero “nunca hubo intención política de permitirles a los vecinos el acceso al agua de red”.
Resolución Nº 188
Luego de la presentación realizada por la vecinal Juana Azurduy, personal de la Defensoría del Pueblo concurrió al complejo habitacional de Acería y constató el deterioro estructural que presentan los edificios donde habitan familias numerosas. También, que al no contar con el servicio de agua potable, se extrae por medio de bombas directamente de napas subterráneas que están “altamente contaminadas debido al contacto con desechos cloacales”.
El resultado de las inspecciones realizadas dio lugar a la Resolución Nº 188, donde el propio defensor del Pueblo Edgardo Bistoletti recomienda al Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente de la provincia que adopte las medidas administrativas necesarias tendientes a efectuar las previsiones presupuestarias para el financiamiento de las obras que permitan el acceso al servicio de agua potable a los vecinos domiciliados en el complejo Fonavi así como las medidas conducentes para impulsar las gestiones que solicita la vecinal Juana Azurduy ante la situación edilicia del complejo.
Resta decir que la reciente resolución, que no tiene carácter vinculante, es celebrada en barrio Acería ya que, según indicó Catalina Frías, “tras miles de gestiones realizadas para denunciar el estado de los monoblocks y reclamar el acceso al agua potable es la primera vez que un organismo nos escucha”.
“Todos los vecinos están asustados. Temen que en cualquier momento se produzcan derrumbes”.
Catalina Farías,
vecinalista.
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