Claves

Más azúcar que agua en la hidratación de los argentinos

El 50 por ciento de lo que bebe la población local está representado por las bebidas con sabor y las infusiones azucaradas, lo cual genera una ingesta oculta de calorías. Pese a lo importante que es el agua para la hidratación, su consumo es limitado.

FUENTE. PRO-SALUD NEWS. FOTO. EL LITORAL

 

“La Argentina es pionera en el desarrollo de guías alimentarias que incluyen el agua como parte de los hábitos saludables de alimentación e hidratación. Sin embargo, en nuestro país faltan recomendaciones que apunten a fomentar su consumo”, expuso el doctor Esteban Carmuega, médico pediatra, director del Centro de Estudios Sobre Nutrición Infantil (CESNI).

La frase fue mencionada durante la presentación para la prensa de los resultados de “Hidratar”, un estudio encargado y liderado por el CESNI, que fue realizado gracias a la colaboración de 800 personas de hasta 65 años, y cuyas conclusiones fueron evaluadas oficialmente en el X Congreso Argentino de Obesidad y Trastornos Alimentarios, que contó con la organización de la Sociedad Argentina de Obesidad y Trastornos Alimentarios (SAOTA), y que se llevó a cabo recientemente en Mar del Plata.

“Podemos subsistir varios días sin comer pero no sin beber, dado que la pérdida de líquido es constante, permanente y sostenida, ya sea por la orina, la respiración o la transpiración. Por eso para nosotros era vital contar con datos sobre la constitución de la ‘jarra de líquidos de los argentinos’. Gracias a este estudio concluimos que, si bien el consumo de líquidos representa la mitad de los actos diarios de ingesta de la población, y pese a que si consideramos todo lo que se bebe en un día hallaremos que el promedio está cerca de lo que recomiendan las guías -2 litros-, lo preocupante es que de ese total, sólo el 21 por ciento corresponde a agua pura. Por el contrario, la mayor parcialidad se la llevan las bebidas con sabor y las infusiones azucaradas”, relató el doctor Carmuega.

Esto significa que aunque el cuerpo necesita sólo agua, cada día se incorpora una gran cantidad de calorías “vacías” a través de infusiones, jugos y otras bebidas azucaradas, superando los valores de ingesta de carbohidratos simples recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en todas las edades, que deben ser menores del 10 por ciento del total de calorías diarias.

CUESTIÓN DE CALIDAD

Por una cuestión cultural, el argentino se inclina hacia infusiones como el mate, el té y el café con azúcar, así como también hacia las bebidas azucaradas, que en definitiva y consecuentemente conforman la mitad de lo que se bebe a lo largo del día, y un aporte extra de calorías que escapan a los mecanismos de control de la saciedad normales: del estudio se extrajo que el 49 por ciento de los argentinos endulza las infusiones con azúcar.

“En definitiva, no se trata de ‘cantidad’ de líquido que se ingiere, sino de la ‘calidad’. Lo que cotidianamente perdemos es agua por lo tanto la base de nuestra hidratación debería ser el agua”, refirieron los profesionales del CESNI.

“Para lograr una hidratación saludable, una medida práctica y fácil de implementar es servir agua a la hora de las comidas, dado que en esos momentos se concentra el 70 por ciento del consumo de líquidos, y es en los cuales habitualmente menos agua pura se toma”, puntualizó Carmuega.

“Controlar y regular la ingesta de líquidos es fundamental para comenzar a luchar contra la epidemia de obesidad infantil y adolescente que estamos teniendo en el mundo, pero sobre todo en nuestro país. Para eso solo basta ver el estudio en el cual se consigna que los jóvenes solo beben un 13,2 por ciento de agua pura, mientas el grueso de la ingesta de líquido se lo llevan las bebidas azucaradas: 67,2 por ciento”, concluyó el especialista y director del CESNI, no sin antes enumerar algunas de las “bondades” del agua: mantener el equilibrio térmico; vehiculizar nutrientes, residuos o toxinas, y mejorar la función renal.

+ información

Centro de Estudios Sobre Nutrición Infantil (CESNI)

http://beta.cesni.org.ar

Sociedad Argentina de Nutrición (SAN)

http://www.sanutricion.org.ar

Claves

- Hidratarse es una necesidad vital e inmediata

- Las bebidas azucaradas y por lo tanto calóricas generan múltiples consecuencias negativas especialmente cuando se consumen durante la niñez: desplazan a la lactancia, generan un hábito y aportan calorías vacías.

- La leche materna es el único líquido que naturalmente contiene calorías.

- Una persona pierde líquido las 24 hs. del día a través de la transpiración, la orina o la respiración.

- La pérdida mínima (1 %) ya compromete la capacidad de prestar atención y realizar operaciones mentales.

- La sed es un mecanismo fisiológico “tardío”, es decir que cuando se tiene esa sensación ya ha comenzado el proceso de deshidratación. Por eso es importante acostumbrarse a tomar líquido y especialmente agua, dado que al generar un hábito, el organismo evita llegar a esa situación y se hidrata antes.

- Las personas mayores, los niños y los adolescentes son especialmente vulnerables a las consecuencias de la deshidratación.

- Para los deportistas, una correcta hidratación es fundamental a la hora de desarrollar cualquier tipo de actividad física, así como una buena rehidratación durante y después de la misma.