En Santo Tomé
Folclore pasado por agua
Las condiciones climáticas hicieron suspender la noche de sábado del Festival Paso del Salado.
Silvia Mugica
En una noche que prometía ser la segunda gran velada de esta trigésimo octava edición del Festival Paso del Salado, la lluvia sorprendió a la gran cantidad de gente que se había acercado a disfrutar de un encuentro musical.
Desde la tarde, la actuación de los músicos que sueñan con obtener un lugar en el Festival de Folclore Pre-Cosquín 2011 se desarrolló ante un público entusiasta que los acompañó desde sus ubicaciones.
Minutos después de las 22, los encargados de la conducción y animación del Festival, Melisa Salari y Jorge Magull, anunciaron el comienzo del espectáculo fuera de concurso clasificatorio, dando la bienvenida sobre el escenario al ballet “Herencia de mi tierra” de Santo Tomé. Los bailarines, bajo la dirección de José María Espinosa, presentaron el cuadro “Aire santiagueño”, compuesto por diferentes ritmos, entre ellos: la firmeza, gatos, chacareras, zambas y escondidos.
Desde la platea, algunos desconfiados no hacían más que mirar el cielo vaticinando lo que el pronóstico del tiempo tenía destinado para esta zona; las nubes que minutos atrás habían dejado apenas unas pocas estrellas a la vista, decidieron ocupar el firmamento para adueñarse por completo del paisaje celestial.
Mientras tanto, a metros de la ubicación del escenario, los distintos puestos que conformaban la feria artesanal ofrecían al visitante una variada y tentadora oferta. Lo mismo ocurría desde los puestos de venta de comida, desde donde el ir y venir de la gente aventuraba una noche larga y afable.
El diluvio
Los encargados en darle continuidad a la noche desde el escenario fueron los integrantes de la Academia de Danzas Defensores de la Tradición, también de Santo Tomé, quienes dirigidos por María Rosa y Gerardo Sánchez prometían un despliegue escénico a puro colorido y destreza. Mientras tanto, las primeras gotas indicaban una preocupación que se pensaba pasajera hasta que el diluvio hizo correr a los presentes a guarecerse en algún techo cercano; al mismo tiempo que el intervalo no programado se demoraba, la gente decidía retirarse del predio para retomar el camino a casa antes de tiempo.
Desde la organización se esperó un tiempo prudencial hasta dar por suspendida la segunda jornada del festival.
Es por ello que Arbolito, la banda creada en el año 1997 por egresados de la Escuela de Música Popular de Avellaneda (Buenos Aires), que se caracteriza por fusionar músicas folclóricas de la Argentina (chacarera, huayno, saya, zamba, candombe, entre otros) con ritmos diferentes, principalmente rock y reggae, no tuvo la oportunidad de subirse al escenario. Del mismo modo ocurrió con Sergio Galleguillo y sus amigos, que a pura chaya suelen enharinar los festivales llevando su alegría y el carnaval riojano.
Cabe señalar que estaba previsto para hoy domingo, a partir de las 16, dar continuidad a la selección de los artistas que se presentarán en el Pre-Cosquín 2011 y recibir por la noche a Soledad Pastorutti, número central que oficiará de broche de oro de esta trigésimo octava edición.
La noche inaugural y la jornada de la víspera concitaron el interés del público. Aquí la actuación de Los Huayra.
Foto: Agencia Santo Tomé
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