El mural de Roux ya ganó el espacio

central del recinto de Diputados

El mural de Roux ya ganó el espacio central del recinto de
Diputados

(...) El diálogo entre representantes y representados queda simbolizado en el espacio pintado”, explicó el autor al descubrirse la obra de enorme fuerza expresiva

Foto: Pablo Aguirre

El autor dijo que la pintura es un acto de fe. Di Pollina subrayó el valor de la Carta Magna para resguardar los principios de libertad e igualdad. Binner, Tessio y Gutiérrez participaron del acto.

 

Mario Cáffaro

[email protected]

“Son los ciudadanos de la calle, marchando juntos, sin agresiones ni violencias, unidos por el color de la misma bandera, que se hacen presentes en este recinto, otorgándoles a ustedes, señores diputados y senadores, la comprensión y defensa de sus derechos. De esta manera la calle entra en el Parlamento y el diálogo entre representados y representantes queda simbolizado en el espacio pintado”, explicó Guillermo Roux la obra que le encomendó la Cámara de Diputados de la provincia y que desde ayer ocupa el espacio central del recinto del edificio.

“No quise un cuadro histórico que nos llevara al pasado. Porque para mí, que soy un simple ciudadano antes que pintor, estamos en el momento de afirmar las instituciones, de darle a la justicia toda su fuerza, de enseñar más y más, de escuelas y más escuelas, y de seguir al pie de la letra lo que manda nuestra Constitución. Y todos, cada uno con su idea, seguro que tenemos un lugar donde encontrarnos, sin renunciar a nuestras creencias, que de eso se trata la democracia, y ese lugar no es otro que el bien y el progreso de nuestra Nación”.

Emocionado, en un acto con muchas emociones, Roux habló desde la presidencia de la Cámara. Antes, el titular del cuerpo, Eduardo Di Pollina justificó la decisión de cumplir con los arquitectos del edificio que reservaron el espacio en la cabecera del recinto para que fuera ocupado con una obra que recreara la importancia de la Constitución de 1853. “Casi un siglo más tarde, se materializa en los trazos de Guillermo Roux”, acotó el socialista cuando todavía no se había corrido el velo del imponente mural.

El gobernador Hermes Binner; la vicegobernadora Griselda Tessio; el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Rafael Gutiérrez, lo escuchaban junto a legisladores, autoridades de otros poderes y especialmente de entidades ligadas a las artes y las letras santafesinas.

Casi tres años después de que la Cámara le encargara la obra al muralista, ésta era descubierta y en el lugar quedó la sensación de que era un día histórico para la Legislatura.

El autor admitió que en el cuadro “quise expresar mi ideario en este momento particular de mi vida y de la República, que son los pensamientos y necesidades de un simple ciudadano pintor. ‘La Constitución guía al pueblo’ es el título que le di, y en ello quiero sintetizar lo que percibí en mis compatriotas y en mis propias necesidades”.

Luego, con tono didáctico explicó el sentido de la representación, se detuvo en la relación de su padre y de él con Antonio Alice -aquel que plasmó Los Constituyentes de 1853 para ese lugar y que terminó en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso de la Nación e hizo un minucioso reconocimiento a quienes lo apoyaron en la tarea pictórica. “Mantener la unidad para concretar una idea plástica y desarrollarla en tiempos tan perturbados como los nuestros, no es tarea fácil. Lo que está aquí en la tela es la concreción, la cristalización de lo que para el alma es una necesidad”, acotó. Remató con “el recuerdo emocionado de nuestros abuelos, que llegaron de otras tierras, hincaron la pala y sembraron junto a los que aquí nacieron, de los que nosotros descendemos. Porque este país nuestro es para nosotros, para nuestra posteridad y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino”.

Base del Estado moderno

Antes, Di Pollina valoró la Constitución del 53 que “sirvió de guía para transformaciones sociales y económicas profundas, diseñó un modelo de país y lo proyectó hacia el futuro. Su aprobación sentó las bases del Estado moderno argentino”.

c_pa.jpg

Binner saluda a Guillermo Roux bajo la mirada del presidente de la Cámara, Eduardo Di Pollina

Foto: Pablo Aguirre

B_PA.jpg

“Es el pueblo que entra a su casa, la Legislatura, a exigir que se cumpla con lo que manda la Constitución”, dijo Guillermo Roux en su alocución frente a legisladores e invitados especiales. Foto: Pablo aguirre.

(viene de pág. anterior)

Mencionó los antecedentes y destacó que “sentó sus raíces en el ideario de libertad y de soberanía popular de la Revolución de Mayo de 1810. Son estos motivos los que nos llevan a decir, que reivindicar la obra que durante tantos años estuvo ausente en nuestra provincia, aquella que retoma ese maravilloso instante y lo hace arte, es preservar en cada uno de nosotros la herencia histórica y cultural recibida, es recuperar los valores democráticos que dieron origen al Estado de Derecho, y es devolverle a la ciudad de Santa Fe, lo que la historia ha decidido: que sea esta ciudad ‘La Cuna de la Constitución Nacional’”.

Reivindicó la Carta Magna “como la garantía de todos nuestros derechos. Es donde están plasmados los principios de libertad e igualdad de todos y cada uno de los habitantes de nuestro país, lo que nos lleva a decir, que si respetamos esos principios, caminamos hacia un país sin exclusión social y con el ejercicio pleno de los Derechos Humanos”.

Interpretó que la pintura “expresa en esta construcción una escena que entra en diálogo directo con cualquier sujeto que decida dirigirla su mirada. El espectador no podrá eludir su presencia, el intercambio entre el observador y la pintura conforman una síntesis indivisible” y ya sobre el final parafraseando al autor “con otros trazos, luces y colores, es posible abrir una ventana, salir, y darle paso a todo un pueblo para que acompañe a la Constitución hasta nuestro recinto”.

La composición según el autor

El propio Roux dejó en claro el sentido de la representación. “Es un friso que se desarrolla horizontalmente, de tal manera que esas horizontales responden a los niveles de la arquitectura del recinto. Arriba, el río, las banderas, las figuras y la hierba que pisan. Las figuras son verticales y contrastan con la horizontalidad, y todo ondula como el río, como las banderas, como las polleras y el pasto. El ritmo del pincel lo une con una caligrafía que crea el movimiento. Las figuras no se separan la una de la otra por el color ni por otra característica que indique diferencias de oficio o de clase. Cierran a ambos lados del friso, girasoles, y todo se ordena en la figura central, la más blanca, que concluye en la pollera, que como una flor nace de la tierra y vuela al viento”.

Detalló que “la parte de arriba de esta figura está encuadrada en una rigurosa forma geométrica, porque en una mano lleva un lazo con los colores de Santa Fe y en la otra el blanco y celeste de la bandera argentina. La figura central no es ni griega ni romana, no lleva laureles ni gorro frigio ni pliegues fuera del tiempo. Es de hoy, viviente, deseable, como una hermosa mujer argentina, porque creo que es hora de darle a nuestros símbolos un sentido actual, necesario y cotidiano. Estilísticamente, y ya en el plano de la teoría del Arte, elegí el lenguaje más natural, el que más espontáneamente nació de mi esencialidad. Quise ser claro, directo, y ya se sabe que las cosas son confusas cuando no se tienen las ideas claras”, dijo Roux.

Políticamente correcto

Plena campaña electoral y esto se notó en las muchas ausencias de legisladores provinciales en el recinto para el acto de inauguración del mural. Dos diputados nacionales presentes (Jorge Alvarez y Miguel Barrios) y tres que se excusaron de no poder estar: Rubén Giustiniani, Carlos Reutemann y Celia Arena. Ningún candidato a gobernador en la sala.

El presidente de la Corte, Rafael Gutiérrez, fue uno de los primeros en llegar al acto e ingresar a la sala de la presidencia donde se encontraba Roux con familiares y legisladores. Al rato llegó Mario Esquivel, vocal del Tribunal de Cuentas, respondiendo a una especial invitación de Di Pollina y se sentó al lado del presidente del Concejo Municipal, José Corral.

Binner llegó solo y fue recibido por Di Pollina y Tessio, hubo afectuosos saludos que se repitieron en el recinto con las restantes autoridades. Ya sobre el final, en el hall de la Legislatura, el gobernador se quedó un largo rato departiendo con los invitados y se detuvo a saludar una a una a las Madres de Plaza de Mayo presentes en el acto. Roux, en tanto, seguía en el recinto recibiendo saludos y dando explicaciones a otros invitados sobre el significado de la obra.