La sucesión de Strauss Khan

Una francesa y un mexicano se disputan la presidencia del FMI

Son la ministra de economía gala, Christine Lagarde y el titular del Banco Central de México Agustin Cartens. Desde su fundación, el organismo estuvo en manos de un europeo.

De la Redacción de El Litoral

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DyN

La ministra de Finanzas de Francia, Christine Lagarde, y el presidente del Banco Central de México, Agustín Carstens, se perfilan como los máximos candidatos a suceder a Dominique Strauss Khan, como director gerente del FMI.

Lagarde oficializó ayer su candidatura durante una conferencia de prensa en París, aunque ya se venía rumoreando desde hacía varios días, esa posibilidad.

Todos los países de la Unión Europea respaldan la designación de Lagarde, mientras que desde los países emergentes, se apoya la llegada de Carstens.

La novedad llegó desde Washington cuando el secretario del Tesoro, Timothy Geithner, se mostró cauteloso a la hora de perfilar una preferencia.

“Por el momento, tenemos a dos personas muy creíbles. Se dice de ellas que les gustaría dirigir esta institución y a ellas se podrían sumar otras”, dijo Geithner.

Desde su creación después de la Segunda Guerra mundial, el FMI siempre ha estado dirigido por un europeo, según una regla tácita que da paralelamente a los Estados Unidos la dirección del Banco Mundial.

Los miembros de la Unión Europea tienen siete de los veinticuatro asientos en el consejo de administración del FMI, el organismo que debe designar al sucesor de Dominique Strauss-Kahn “por consenso” y si no se llega a él, en una votación.

Cinco administradores, representantes del grupo de países emergentes llamados Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), abandonaron su mutismo habitual para criticar la prisa de los europeos por conservar el cargo de director general, que monopolizan desde hace 65 años.

Posiciones

Los 24 miembros del consejo de administración del FMI deben intentar llegar a un “consenso”, antes del 10 de junio, para designar a un nuevo director general.

Los Estados Unidos y Japón se mantienen expectantes y sus representantes se han reservado la decisión para más adelante.

Otros dos países que suelen apoyar las posturas de Estados Unidos se mantienen también expectantes como Canadá (que representa a Irlanda, a nueve países del Caribe y a Belice) y Arabia Saudita.

México respalda a Agustín Carstens y su representante cuenta con el apoyo de seis países de América Latina y España.

Rusia, por su parte, avala a Grigori Martchenko de Kazajastán. En tanto, Suiza está en una posición particular, representa a un miembro de la UE, Polonia, y a cinco países de Asia Central, que tienen como candidato a Martchenko.

Hay seis administradores a convencer, entre ellos de Argentina que representa a seis países sudamericanos y se mostró en principio favorables a que sea un representante no europeo quién quede a la cabeza del FMI.

Timerman y la Ronda de Doha

El canciller argentino, Héctor Timerman, afirmó hoy que la ronda de Doha sobre la eliminación de barreras al comercio mundial, debe favorecer la integración en el sistema internacional de los países en vías de desarrollo.

“Lo que no puede aceptar Argentina es que el éxito de la ronda signifique el retroceso de los países en vías de desarrollo”, dijo en una entrevista con EFE en París, donde se trasladó para participar en una cumbre de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde). Timerman, que se reunió con el director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Pascal Lamy, le trasladó la postura argentina de que el comercio “tiene que servir para obtener un mejor desarrollo y una mejor calidad de vida” de todos los países, y no sólo de los más ricos, subrayó.

“La ronda de Doha tiene que ser un vehículo para el crecimiento de los países en vías de desarrollo, principalmente para disminuir la brecha que existe” entre los más y menos desarrollados, aseveró.