Planteo
Se agudiza la falta de viviendas en Ceres
Martín Farías-Red de medios
La falta de viviendas se ha convertido en un problema acuciante. Lo planteó el intendente de Ceres, Camilo Busquets, ante el senador Michlig y el ministro de Obras Públicas, Hugo Storero. El funcionario provincial tomó nota, aunque no fue ninguna novedad, porque en la provincia según propias estimaciones del gobierno se necesitan por encima de las 100 mil viviendas para compensar el enorme problema habitacional. Busquets confirmó aquella tarde que son 900 familias las que esperan una chance por su propia casa. Claro que también destacó el mandatario local que de esas 900 familias, “hay gente que no puede pagar una cuota como la que exigirá el plan Fonavi, o cualquier programa habitacional estructurado como lo están actualmente”.
El problema de la casa propia se agudizó en los últimos tiempos, Storero dijo que “eso se debe a la migración constante de gente”. Ese dato no es irrelevante, Ceres se ha nutrido de familias que decidieron renunciar a seguir atados a la zona rural y venirse al pueblo. “Es que los malos tiempos del campo con la sequía detonaron una migración masiva de la gente de campo”.
Escasos recursos
Esos pobladores, sin recursos para comprar una casa, y mucho menos para hacerse de un terreno y construir su propia vivienda, llegaron a instalarse en la periferia, y alquilaron casas en distinto estado, muchas de ellas sin comodidades para vivir. En esas viviendas el hacinamiento tampoco es raro, en varios barrios de la ciudad, en una misma casa conviven varios integrantes del clan, convirtiéndola en un albergue improvisado.
La preocupación, ante la escasez de casas, fue uno de los principales pedidos de la gente en la visita de candidatos en plena campaña. En la entrega de certificados de propiedad de cinco viviendas del programa de emergencia habitacional en el barrio El Silencio, el intendente aseguraba, en una entrevista con este mismo medio, que “queremos impulsar un área especial para viviendas, donde nosotros aportemos el material para construir la casa mediante gestiones ante entes nacionales, la mano de obra sea del beneficiario, y con lo que se pueda ir devolviendo de esa casa, ir haciendo otras, apoyados en un sistema netamente solidario”.
Una alternativa
Pocos días después, Busquets entregó certificados a propietarios de las cooperativas de viviendas, el mejor sistema para que las clases bajas accedan a su propio techo. Tal vez, analizándolo fríamente, el programa mejor estructurado, si se cumple con el objetivo final que cada cooperativa construya la casa para cada uno de sus integrantes. Lo perfecto no existe y por eso “hay demoras también, en la construcción de viviendas cooperativas”.
En Ceres, es necesario que la cuestión del faltante de viviendas empiece a solucionarse. “Para que esto pase, también es necesario que quienes han obtenido su casa propia por distintos planes sean solidarios con quienes no la tienen y paguen sus cuotas religiosamente”. El municipio local donó 38 terrenos para que la provincia construya para los docentes esa misma cantidad de viviendas. Se le entregó al ministro un proyecto para que se financie la construcción de viviendas en lotes propios. Son pequeños logros que, en el inmenso problema de la vivienda, resultan lamentablemente un dato menor.
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