En el conflicto por la pastera Botnia

Tabaré justificó aprestos bélicos

Recordó que el Ejército tomó intervención ante una serie de incidentes. Sus dichos le valieron críticas desde Argentina y Uruguay, pero se convino evitar reacciones oficiales.

De la redacción de El Litoral

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El ex presidente de Uruguay Tabaré Vázquez ratificó las gestiones que hizo con Estados Unidos por temor a una guerra con Argentina a raíz del conflicto por el funcionamiento de la papelera, lo que causó el repudio de ambientalistas y de dirigentes políticos de ambos países. “Ahora todos se sorprenden y se rasgan las vestiduras, y parece que se olvidan que por el conflicto de Botnia sacamos el Ejército a la calle”, aseveró Vázquez al diario El Observador de Uruguay. En ese sentido, afirmó que “hay que recordar que los piqueteros dijeron que vendrían a manifestar a Uruguay, que hubo quien dijo que iba a venir con dinamita, amenazaron con ocupar la planta de Botnia, los militantes de Greenpeace manifestaron en el río y tiraron al agua a un oficial de Prefectura -episodio desmentido por la organización ecologista-, entre otros hechos”.

Durante una visita a ex alumnos del colegio Monte VI, de Montevideo, Vázquez admitió ayer que durante el conflicto diplomático hizo gestiones ante la secretaria de Estado norteamericana Condoleezza Rice para analizar el respaldo del gobierno de George Bush ante esa hipótesis bélica. Luego dijo que se reunió con comandantes en jefe del Ejército y les planteó el posible escenario. “Me dijeron: ‘Bueno, podemos hacer una lucha de guerrilla’ ”, expresó.

Estas declaraciones generaron un rotundo rechazo de dirigentes políticos de ambos países como de ambientalistas de Gualeguaychú que encabezaron las protestas contra el funcionamiento de la papelera por considerarla contaminante.

Repudios

El ex canciller Rafael Bielsa acusó al uruguayo de ser “un hombre parroquial, doméstico, suburbano, sin conocimientos en derecho internacional ni en política internacional”. En diálogo con el diario La Nación, Bielsa afirmó que “confunde el tablero del mundo con el Café La Humedad”. Y añadió que “tuvo un comportamiento sistemáticamente mendaz respecto de la Argentina. Que ahora agregue detalles operativos sobre la posibilidad de una agresión bélica lo único que hace es rebajar todavía más su inexistente estatura de estadista”.

Desde Uruguay, el diputado del Partido Nacional José Carlos Cardoso rechazó de plano la actitud de Vázquez y se manifestó consternado por el “striptease mediático” del ex mandatario al hacer estas revelaciones. “La política intervencionista de los Estados Unidos debe estar absolutamente erradicada de cualquier pensamiento político en la región”, advirtió en diálogo con radio La Red y acusó al ex mandatario de haber tenido una posición “altamente rechazable”.

“Todos los presidentes de la región manejaban esa hipótesis de conflicto, otra cosa es que se admitiera”.

Tabaré Vázquez,

en declaraciones al diario El Observador

“La abrumadora cantidad de ignorancia de Tabaré me hace imposible interpretar qué objetivo persigue”.

Rafael Bielsa,

ex canciller argentino.

Silencio acordado

“Si hablamos y decimos lo que pensamos le vamos a estar haciendo el juego a Tabaré. No tiene sentido”. Con esa frase, atribuida por el diario La Nación a “un destacado diplomático argentino”, se resume el criterio adoptado por Buenos Aires y Montevideo ante las declaraciones del ex mandatario público. Así lo convinieron los cancilleres de Uruguay y de la Argentina, Luis Almagro y Héctor Timerman, respectivamente, a través de un breve diálogo telefónico. Y es la razón por la cual desde ninguna de las dos orillas hubo declaraciones públicas al respecto.