Analizan los móviles

Dudas en torno al crimen de la joven asesinada con un disparo en el rostro

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La joven Maricela. Sus familiares sostienen que ella no conocía a su agresor.

Foto: Archivo

Télam

Los investigadores del crimen de Maricela Andrea Servezynsky (20), asesinada el sábado cuando viajaba en un colectivo en San Miguel, secuestraron en la casa del único detenido por el hecho un revólver calibre .32 que pudo haber sido utilizado en el homicidio.

Además, los pesquisas aún no tienen en claro el móvil del crimen y esta mañana perdía fuerza la hipótesis original que señalaba que el homicida era un joven que se sentía rechazado por la víctima y que la mató porque se negaba a salir con él. Fuentes policiales aseguraron a Télam que el arma fue secuestrada durante un allanamiento realizado esta mañana en la casa de Tomás Leandro Romero (25), ubicada en Tres Marías y Rivadavia, de San Miguel, y se trata de un revólver calibre .32 marca Taurus, el mismo utilizado para asesinar a Maricela.

Tras este hallazgo, los investigadores policiales trasladaron al detenido hasta la sede judicial en la que este mediodía será indagado por el fiscal de instrucción de Malvinas Argentinas, Daniel Moccia.

“Era lo único que nos faltaba para cerrar el cerco contra el joven detenido. La ropa que llevaba puesta al momento del hecho ya la había aportado su esposa cuando se presentó ante la Justicia”, dijo a Télam un jefe policial.

También el celular

Además, los investigadores analizaban esta mañana el teléfono celular de la víctima, el cual había sido arrebatado por el homicida al momento del hecho y fue hallado en poder de Romero.

Según las fuentes, el teléfono estaba apagado, sin el chip que pertenecía a Maricela, pero con todas las fotos personales de la víctima, las cuales aún no habían sido borradas.

“No sabemos qué es lo que pretendía hacer con el celular. Lo cierto es que lo tenía en una mochila al momento de la detención, sin el chip, apagado, pero con todas las fotos y los datos que pertenecían a la víctima”, explicó el investigador.

Los pesquisas de la policía de San Miguel pusieron hoy en duda la versión original sobre el presunto móvil del crimen y ya no están tan convencidos de que se haya tratado de un joven que se sentía rechazado por la víctima ante las invitaciones a salir. La madre y un tío de Maricela salieron a desmentir la hipótesis policial y aseguraron hoy que la joven no conocía a su agresor y que nunca le había contado a nadie que existiese algún hombre obsesionado con ella.

Por eso, los investigadores tampoco descartan que el homicidio esté vinculado a un hecho de robo común, teniendo en cuenta que el detenido por el crimen, tenía en su poder el teléfono celular de la víctima.

“No conocía a su agresor”

La madre de Maricela Andrea Servezynsky (20) aseguró que su hija “era una chica especial”, que no conocía a su agresor y dijo que el asesino “no tenía derecho a quitarle la vida de esa manera”.

“No sabemos quién es (el agresor) y descartamos que lo conociera porque me lo hubiera contado. Yo más que la madre era la amiga porque me contaba todo y ella no escondía nada”, dijo Marisa esta mañana.

La mujer explicó que habló con las amigas de su hija y todas negaron que hubiera algún joven que la estaba invitando a salir o que estaba obsesionado con ella.

“Nunca dijeron nada que hubiera alguien que la estaba persiguiendo. La Justicia preguntó a todas las amigas y nadie dijo nada. No había nada que ocultar en la vida de ella”, agregó. “Era una chica especial, que le gustaba estudiar, estaba haciendo el CBC en la universidad para estudiar abogacía y además estudiaba para chef. No tenían derecho a quitarle la vida de esa manera, le quitaron todo su futuro. No le dieron posibilidad de defenderse. Quisiera que esta persona pague lo que hizo”, explicó.