El día que naufragó un estilo de vida

El hundimiento del Titanic fue algo más que una tragedia que provocó la muerte de más de 1.500 personas. Para los historiadores, la tragedia del barco que “ni Dios podía hundir” es el signo de una época o, para ser más precisos, el fin de una época. El Titanic como tragedia es un hecho histórico que se produjo el 15 de abril de 1912, hace exactamente un siglo; pero es también un mito y una leyenda.

De domingo a domingo

Realidad argentina, un palimpsesto que no llega a secar

Un palimpsesto es un manuscrito antiguo que conserva huellas de una escritura anterior borrada artificialmente. Unos sobre los otros, los hechos más nuevos cubrían a los anteriores, hasta que el último sobrevivía y conseguía su lugar en la historia. En la febril actividad que impone la política en la Argentina de hoy, esas reposiciones de ‘agenda’ se hacen cada vez a mayor velocidad, tanto que en una misma semana hubo varios hechos que adrede o involuntariamente fueron tapando en vendaval a todos los acontecimientos previos. ¿Quién se acuerda del allanamiento del caso Ciccone, episodio que la semana siguiente pasó a ser el caso Boudou y luego el del Procurador Esteban Righi y ahora el caso del designado Daniel Reposo? Ni que hablar del accidente de Once y sus 51 víctimas que ya va para dos meses o de las muertes por inseguridad que se suceden a diario, algo que la sociedad parece ya tolerar como si fuese casi natural.

JÓVENES LIBREROS SANTAFESINOS

Entre el libro en papel como “objeto precioso” y los nuevos soportes

Alguna vez sucedió, o nos quisieron hacer creer que sucedió, que dos palabras históricamente unidas, entremezcladas, afines, devinieron antónimos: jóvenes y libros, lectura y juventud, se escindieron, se separaron, se distanciaron, se transformaron en una suerte de contradicción u oximorón. A la distancia, podemos preguntarnos si efectivamente eso es así, si alguna vez lo fue, si lo será. ¿Fue un lugar común, un prejuicio, un malentendido, un cliché? ¿Fue quizás un reflejo del posmodernismo, de los años 90‘s, de las nuevas tecnologías, de la anomia que se atribuye a la juventud, de los cambios de costumbres generacionales? Depende a qué cifras acudamos, empero, la balanza va para uno u otro lado: los mayores se escandalizan por la inepcia de muchos jóvenes para la lectura, pero a la vez, cientos de miles leen. Leen con fruición a clásicos del boom, o a Shakespeare, o historia política.

Al margen de la crónica

Sabiduría digitalizada

Hay que aprovechar: las bibliotecas de la Universidad de Oxford y del Vaticano anunciaron esta semana que publicarán en internet miles de textos griegos, hebreos y del Renacimiento italiano para su consulta libre y gratuita.