/// EL INVITADO

Por qué rechazamos el aumento

Sociedad Rural de Rosario

 

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Los productores agropecuarios somos discriminados impositivamente. Nuestros productos tienen impuestos a las ventas (retenciones) con altos porcentajes, como en el caso de la soja, hasta 35%. Pero también pagamos todos los impuestos que pagan los otros sectores como ganancias, bienes personales, impuesto al cheque, hasta IB en algunos casos, impuesto inmobiliario y tasa comunal por ha.

Todo sabemos como subió el valor la tierra en estos últimos años y este es el argumento con el que las provincias, incentivadas por la Nación, pretenden subir el inmobiliario acorde a estos nuevos valores, sosteniendo que es muy bajo lo que actualmente se paga.

Sin embargo hay que tener en cuenta que la renta sobre la tierra está en no más de un 2 o 3 %; es decir, quién compre una hectárea necesitará bastante más de 35 años para pagarla con su renta. Esto nos está indicando que la tierra ha pasado a ser un refugio de inversión, quizás porque estamos en un país en el que es muy difícil encontrar negocios atractivos y por lo tanto se busca resguardar capital.

Pero para los productores no se trata de un negocio inmobiliario, deben hacerla producir y por más valor que tenga la tierra la renta es acotada, no acompaña ese valor. Los productores agropecuarios viven de su renta y no de su valor inmobiliario.

Por eso desde la SRR consideramos que no se puede ampliar la carga impositiva con subas en el impuesto inmobiliario, y menos aún con un revalúo de su tierra. Esto significaría una cascada sobre otros impuestos que emigran hacia la Nación, asumiendo el costo político los gobiernos provinciales.

Es hora que se solucionen estos problemas económicos, mejorando la coparticipación del Estado Nacional, con una reforma tributaria más equitativa que permita al interior que lo que genere vuelva, con un sistema más justo y más federal. No es con más impuesto a los productores que mejorarán las arcas provinciales, la mayor producción se logra con más inversión, y a menor renta menor inversión. Los Gobiernos Provinciales deben ponerse al frente de esta reforma, seguramente encontrarán apoyo por parte de sus poblaciones.