Al margen de la crónica

Un exótico hospital cinco estrellas

La afición por la cetrería en el rico emirato de Catar llega hasta el punto de que los halcones disponen de un hospital de cinco estrellas en el centro de Doha, que cuenta, incluso, con un centro cosmético para estas rapaces.

La práctica de la halconería en Catar se remonta a la época de los beduinos y se ha arraigado aún más desde 2010 con la celebración anual del Festival de Caza y Halcones.

Los cataríes gastan ingentes cantidades de dinero en estos animales, cuyo precio oscila entre los 400 que cuesta uno normal y los 20.000 que se pagan por el preciado halcón blanco.

Los aficionados a la caza con estos pájaros suelen viajar a emiratos colindantes para participar en festivales y competiciones.

Tal es el esmero con que cuidan a los animales, que suelen viajar con ellos en las cabinas de pasajeros de los aviones, de hecho, la aerolínea Qatar Airways permite subir en cada vuelo a seis propietarios con sus halcones sobre el brazo.

El popular zoco de Doha cuenta con una zona dedicada exclusivamente a la venta de halcones y todo lo que tiene que ver con su cuidado y atención médica.

En el laberíntico mercadillo, de arquitectura tradicional catarí, destaca el moderno edificio que alberga el Hospital de Halcones de Souq Waqif, que abrió en su ubicación actual hace dos años y medio y atiende a más de 7.000 “pacientes” al año.

Con más de veinte empleados, este centro ofrece a los halcones de ocho especies diferentes un servicio de cinco estrellas con equipamiento de última tecnología.

Uno de sus rincones más llamativos es el departamento cosmético, que cuenta con una amplia selección de plumas de todos los colores posibles, a disposición de aquellos halcones que las hayan perdido o las tengan dañadas.

El centro tiene dos secciones principales: la clínica y la de investigación. Pese a tratar animales que cuestan miles de euros, el tratamiento en el hospital, que dispone de financiación pública, es muy barato en comparación con otros centros, los gastos oscilan entre 70 (14 euros) y 400 riales (85 euros), dependiendo de la duración y el tipo de atención. Los halcones son llevados al hospital con frecuencia para revisiones o procedimientos quirúrgicos, en caso de sufrir lesiones que puedan afectar a su rendimiento. Estas aves pueden vivir hasta 20 años y padecen habitualmente enfermedades bacterianas o provocadas por parásitos o virus.

Las especies de halcones más comunes en Catar son Saker, Gerifalte y Peregrine, y suelen tener orígenes variados, como Mongolia, el Reino Unido y los Estados Unidos.

Los machos pesan entre 900 gramos y 1,4 kilos, y las hembras de 800 gramos a un kilo.

En Catar hay un gran negocio en términos de halconería. Algunos propietarios tienen hasta 35 halcones, mientras que las granjas pueden tener más de 250 pájaros.

Con estos datos no parece que esta tradición vaya a desaparecer en el emirato, donde el lujo y la riqueza de los petrodólares y los ingresos del gas se han mezclado con esta costumbre beduina para quedarse entre los cataríes por más tiempo.