Tigre, el rival

Botta pero no firma

De la Redacción de El Litoral

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El talentoso volante de Tigre Rubén Botta confesó que ya no cree que vaya a renovar contrato con el club, pero aclaró que no es por su culpa, sino porque los dirigentes piensan distinto y es mentira que hayan ofrecido fortunas como dijeron, algo que lo hizo “enojar”.

“Ya no creo que renueve contrato con Tigre, pero no es por culpa mía, porque la diferencia económica no es tanta. Y es mentira eso que dijeron de que me ofrecieron fortunas. Eso me hizo enojar”, disparó Botta en una entrevista con el programa radial Deportivo Télam.

“A principios de año puse toda mi voluntad para renovar, pero los dirigentes piensan distinto que yo. Y en cuanto a mi relación con Sergio Massa (intendente de Tigre y hombre fuerte del club de Victoria), es de hola y chau, pero nada más”, enfatizó.

Botta es hoy una de las figuras del fútbol argentino desde su puesto de enganche, una especie en extinción en el país, por lo que el Inter, de Italia, ya posó sus ojos en él. Su contrato con Tigre vence en junio próximo.

“No sé nada de eso que dijo mi representante (Sergio Levinston) sobre que existe un 90 por ciento de posibilidad de irme a jugar a Inter. Pero mientras tanto yo seguiré dejando todo por el equipo, como hasta ahora. Después, mi relación con los dirigentes es otra historia. No hay que mezclar las cosas”, advirtió.

En cuanto a su relación con los hinchas de Tigre, aceptó que “con algunos es buena y con otros no tanto. Alguno seguramente estará enojado, pero el que entiende de esto sabe cómo son las cosas. Al que siempre le voy a estar muy agradecido es a (Néstor) Gorosito, porque me bancó siempre, desde el primer día que llegó al club. Él me aconsejó muy bien sobre cómo tenía que comportarme, tanto dentro como fuera de la cancha”, reconoció.

“En cuanto a (Rodolfo) Arruabarrena (el anterior entrenador del “Matador”), la verdad que no sé por qué no me ponía. Quizás no le gustaba cómo jugaba”, apreció.

Este sanjuanino de 23 años se inició en las inferiores de Boca Juniors, donde Sergio Saturno (hoy técnico de la reserva xeneize) lo dejó en libertad de acción cuando transitaba por la quinta división.

“Estuve tres años en Boca y después de quedar libre me fui a probar a Tigre. Alguna vez me gustaría ponerme la camiseta azul y amarilla. También tengo el sueño de ser convocado al seleccionado algún día, pero la verdad es que en este momento no pienso en eso, sino solamente en seguir avanzando con Tigre en la Libertadores y en el campeonato local”, remarcó.