Su primera actividad fue rezar en la basílica de Santa María la Mayor

Francisco a los cardenales: “Que Dios los perdone por lo que han hecho”

Francisco a los cardenales: “Que Dios los perdone por lo que han hecho”

El nuevo Papa le hizo esta mañana una ofrenda floral a la Virgen. Foto: efe

 

El portavoz vaticano contó que el argentino hizo la humorada en la cena de anoche con quienes lo eligieron. El flamante pontífice llamó ayer por teléfono, tras ser elegido, al obispo emérito Benedicto XVI.

 

De la Redacción de El Litoral

[email protected]

EFE

“Que Dios los perdone por lo que han hecho”, dijo el Papa Francisco, durante la cena en la residencia de Santa Marta, a los cardenales que le eligieron, informó hoy el portavoz vaticano, Federico Lombardi.

Francisco llamó ayer por teléfono, tras ser elegido, al pontífice emérito Benedicto XVI, según el portavoz.

Lombardi dijo hoy que de momento no está previsto que el Papa vaya a Castel Gandolfo a visitar personalmente a su antecesor.

“Lo hará, pero no en estos días”, subrayó Lombardi.

El nuevo Papa, el cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio, de 76 años, recibió ayer la felicitación y la reverencia de los otros 114 cardenales electores una vez elegido pontífice en la capilla Sixtina, de pie, y no sentado, como suele ser lo normal en momentos como ése.

Después abandonó la capilla para dirigirse a la residencia de Santa Marta no en el automóvil oficial del Vaticano, el SCV1, sino en el autobús con los otros cardenales.

Durante la cena, agradeció a los cardenales la confianza puesta en él, a la vez que les dijo: “Que Dios os perdone por lo que habéis hecho”.

El Papa se aloja en Santa Marta y esta mañana lo primero que hizo fue trasladarse en un automóvil del Vaticano, no el oficial, a la basílica de Santa María la Mayor, muy unida a España, donde se encuentra el ícono de la Virgen Salus Popoli Romani, muy venerada por los romanos.

Le acogió el arcipreste de la basílica, el cardenal español Santos Abril, y el vicario de Roma, el cardenal Agostino Vallini.

El Papa rezó unos diez minutos y después visitó la cripta del templo, donde se encuentra la cuna, en la que según la tradición fue colocado Jesús cuando nació.

Saludó a los sacerdotes y personal del templo, así como a numerosos fieles, entre ellos una mujer embarazada de cinco meses, a la que bendijo.

De vuelta al Vaticano, hizo una parada en la residencia donde se alojó en los días previos al cónclave.

Allí recogió su maleta con las cosas que trajo a Roma y pagó la cuenta, “para dar el ejemplo”, contó hoy el portavoz, Federico Lombardi.

Después regresó al Vaticano, donde esta tarde oficiará en la Capilla Sixtina una misa con todos los cardenales.

Posteriormente, irá al apartamento papal del Palacio Apostólico, al que se quitará el precinto y comenzarán las obras de acondicionamiento del mismo.

De momento, se desconoce el tiempo que permanecerá alojado en Santa Marta.

Ayer, después de anunciada su elección, sus primeras palabras, en italiano, fueron: “Hermanos y hermanas, buenas tardes. Sabéis que el deber de un cónclave es dar un obispo a Roma y parece que mis hermanos cardenales han ido a buscarlo casi al fin del mundo, pero estamos aquí”, en medio de los aplausos de los presentes y ondear de banderas argentinas.

Francisco se presentó vestido con la sotana blanca y con la estola, pero sin esclavina roja. Según los observadores, esa vestimenta puede ser la muestra de que quiere ser un papa sencillo. El hecho de que se inclinara ante los fieles también fue visto en esa dirección.


/// OPINIÓN

¿Paka o Papa?

Guillermo Dozo

A partir de la aparición del humo blanco que anunció la elección el nuevo Papa, prácticamente todos los canales de televisión abierta como aquellos destinados a la información, comenzaron a transmitir en directo el momento histórico de la sucesión de Benedicto XVI. Canales británicos, norteamericanos, franceses, españoles -obviamente los italianos- pero también la televisión Al Jazeera y otras señales “exóticas” mantenían la expectativa por saber quién ocuparía el sillón de Pedro.

En ese enorme universo, un canal llamó la atención con su puesta en el aire: la televisión pública, aquella que es financiada por todos y que supuestamente identifica a “lo argentino”, mantuvo la emisión del programa infantil “Paka-Paka”, mientras el mundo saludaba la llegada de Francisco como el nuevo obispo de Roma.

Una hora más tarde, pasados unos minutos de las 17, Canal 7 decidió sumarse a lo constituye una de las noticias más importantes en la historia de nuestro país además de marcar un nuevo rumbo en la Iglesia Romana: Jorge Bergoglio, latinoamericano y argentino, es Francisco, el nuevo Papa. En síntesis, una llamativa demora que, lamentablemente, alimenta los fantasmas de la confrontación política por sobre cualquier excusa técnica que se pueda esgrimir.

[email protected]

la boda que no fue

Bergoglio pudo haber terminado en el altar, pero como marido, si su noviazgo con Amalia, su “novia” del barrio durante la secundaria, hubiera prosperado.

“Si no me caso con vos, me hago cura”, le dijo un día Bergoglio a Amalia, su “novia” del barrio porteño de Flores, cuando apenas contaban doce años, relató hoy la mujer a medios locales.

/// EL DATO

No se baja del autobús

El papa Francisco siguió siendo fiel a su estilo de vida sencillo y después de su presentación ante los creyentes en la Plaza de San Pedro volvió en autobús a su residencia en vez de utilizar la limusina papal puesta a su disposición, informó hoy el cardenal austríaco Christoph Schänborn. “Los empleados del Vaticano estaban especialmente impresionados”, dijo el arzobispo de Viena a la agencia de noticias austríaca APA en Roma sobre la actitud del nuevo pontífice en la noche del miércoles. Francisco también renunció a ponerse la muceta roja de armiño, que sí había utilizado su antecesor Benedicto XVI tras su elección en abril de 2005. Schänborg, quien también figuraba entre los papables, calificó el gesto del Papa argentino como una “sorpresa positiva” y dijo que espera del nuevo jefe de la Iglesia Católica un pontificado marcado por la sencillez y la ausencia de complejidad. “Es un Papa que seguramente tiene preparadas varias sorpresas más”, estimó el purpurado.