Un encuentro histórico

Francisco visitó a Benedicto XVI

El actual Papa realizó hoy una visita privada a su predecesor, en Castelgandolfo, produciéndose así la primera reunión en la historia de la Iglesia Católica entre dos pontífices.

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Luego de rezar, Francisco y Benedicto se reunieron a solas en la biblioteca privada. Francisco regaló a Benedicto XVI un cuadro de la Virgen de la Humildad. Foto:efe

 

Redacción de El Litoral

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Agencias EFE/DPA/DYN

El Papa Francisco realizó hoy una visita privada a su predecesor, Benedicto XVI, en Castelgandolfo, produciéndose así un encuentro histórico en la historia de la Iglesia católica.

Cuatro días después de la ceremonia de inauguración, el Sumo Pontífice voló en helicóptero desde el Vaticano a la residencia papal veraniega, al sur de Roma.

La visita duró casi tres horas y durante la misma rezaron juntos en la capilla del palacio apostólico, mantuvieron un encuentro a solas durante 45 minutos y comieron junto a los secretarios privados.

El Vaticano destacó el carácter privado de la cita. Según las informaciones, el pontífice alemán preparó un memorando personal para su sucesor, que tendrá que afrontar varias crisis, así como el caso “Vatileaks” sobre manejos ilícitos en el Vaticano.

Tras el encuentro, el papa Francisco regresó al Vaticano en un helicóptero que partió de Castel Gandolfo a las 13.42 GTM. El Papa fue despedido en el helipuerto por Benedicto XVI.

Esta ha sido la primera vez que se ven desde que el cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio, de 76 años, fue elegido papa, el 13 de marzo, aunque ya habían hablado por teléfono en varias ocasiones en estos días.

Coincidencias

Se da la coincidencia que Francisco usó el mismo medio de transporte que uso Ratzinger el pasado 28 de febrero para abandonar el Vaticano tras casi ocho años de pontificado.

El Papa emérito y su sucesor latinoamericano se conocen desde hace tiempo y han leído sus respectivos libros.

Jorge Mario Bergoglio elogió a Ratzinger en varias ocasiones después de su elección como pontífice y ante los cardenales le dio las gracias por su labor.

Joseph Ratzinger, de 85 años, se retiró el pasado 28 de febrero alegando razones de salud y vivirá en Castel Gandolfo hasta que concluyan las obras de reformas del convento del Vaticano a donde se trasladará definitivamente para pasar el resto de sus días.