Pretenden facilitar el acceso a la casa propia en tierra urbanizada

Cerca de 40 familias rafaelinas fueron favorecidas con los créditos Procrear

 

Incluye a los grupos familiares que adquirieron sus terrenos a través del Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) y ha participado de los distintos sorteos que se realizaron en el marco del Programa Crédito Argentino (Procrear), financiado con recursos nacionales.

 

Agencia Rafaela

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El Instituto Municipal de la Vivienda fue creado por decreto-ordenanza el 10 de marzo de 1967 como entidad autárquica de la Municipalidad de Rafaela y tras una modificación de su estatuto se lo facultó a adquirir tierras, con el objetivo de facilitar a las familias rafaelinas el acceso a la casa propia en tierra urbanizada. Para este fin, el IMV adquirió terrenos en 2006, por medio de un préstamo otorgado por el Estado municipal. Posteriormente, se lo fue dotando, por tramos, de los servicios básicos y luego fueron puestos a la venta en distintas etapas.

La operatoria que realizaron oportunamente con el IMV, mediante las diferentes etapas del Plan Venta de Lotes, hicieron posible la inscripción y participación en este programa que impulsa el gobierno nacional.

La adquisición de los lotes a través del Instituto Municipal de la Vivienda incluyó, para las familias adquirentes, la obligación de justificar una residencia mínima de 10 años en la ciudad, además de otros requisitos indispensables. En el último sorteo, realizado el 22 de marzo, fueron 11 los grupos familiares que se vieron favorecidos. Anteriormente, otros 28 hogares habían tenido el acceso al crédito.

Esta alternativa fue posible merced al trabajo del IMV, la herramienta de gestión de la Municipalidad de Rafaela en el tema habitacional, que trabajó en el acceso a la tierra de familias de Rafaela y además asesoró en cuanto a los pasos a seguir con el Procrear, a fin de cumplir con la requisitoria exigida por el programa.

Política de hábitat

A su turno, la secretaria de Desarrollo Urbano, Suelo y Vivienda, Mariana Nizzo, sostuvo que “la gestión que llevó adelante el Municipio junto con la Anses y el Banco Hipotecario, tuvo como fin que se facilite el acceso de este tipo de trámites que siempre son engorrosos. La verdad es que los vecinos manifiestan una gran confianza en la Municipalidad y, por supuesto, también en el Instituto Municipal de la Vivienda, como herramienta de concreción de las políticas de hábitat, uno de los ejes del intendente Luis Castellano”.

La funcionaria agregó que “la novedad de esto es que estaríamos brindándoles el proyecto de la vivienda, es decir, diseños de tipologías donde la gente va a tener el proyecto incorporado como un aporte del Municipio y del Instituto Municipal de la Vivienda”.

“Esto refuerza la idea de seguir trabajando en políticas de hábitat porque queremos que los rafaelinos no sólo se queden con el lote, sino que queremos empujar para que puedan concretar su casa propia, el resultado final de todo este proceso”, finalizó Nizzo.

Por su parte, el director Ejecutivo del IMV, Marcelo Bersano, aseguró que el ente “continúa trabajando para que nuevas familias puedan obtener estos créditos y ha inscripto junto con la Anses a 127 nuevas familias para el próximo sorteo que es el 26 de abril''.

“Cuando nos planteamos una política de vivienda trabajamos para que los ciudadanos puedan dar el primer gran paso, que es la posesión del lote. Después, por diferentes mecanismos, lograr la construcción de la vivienda. La diferencia que existe en ambas instancias es que el lote no se puede comprar por partes, mientras que la vivienda sí se puede ir construyendo por etapas, lo que posibilita y aumenta la capacidad de ahorro”, concluyó Bersano.

Objetivo primordial

  • El Programa de Crédito Argentino del Bicentenario para la Vivienda Única Familiar fue lanzado a mediados del pasado año por el gobierno nacional y otorgará 400 mil créditos en 4 años, 100 mil para el período 2012-2013.

El Procrear tiene por objetivo atender las necesidades habitacionales de los ciudadanos de todo el territorio nacional, contemplando las diferentes condiciones socioeconómicas y la multiplicidad de situaciones familiares -numerosas, monoparentales, unipersonales, recién constituidas, etc.-. Esta amplitud se alcanza fundamentalmente articulando dos líneas de acción estatal: por un lado, la construcción de proyectos habitacionales y la movilización de recursos públicos en un programa de préstamos hipotecarios.