Por la muerte de miles de manifestantes

Hosni Mubarak se declara “no culpable”

Agencia DPA

El ex presidente egipcio Hosni Mubarak rechazó hoy cualquier responsabilidad en el juicio por la muerte de centenares de manifestantes durante las revueltas de la Primavera Árabe.

Tanto el mandatario, de 85 años y en silla de ruedas, como el resto de acusados se declararon “no culpables” en el gigantesco proceso que arrancó hoy con un nuevo juez en la academia de policía de El Cairo.

Tras la lectura de la acusación y acaloradas discusiones con la acusación particular que representa a las familias de las víctimas, el juicio fue aplazado. La próxima cita es, según informa la televisión estatal, el 8 de junio. El presidente derrocado hace dos años debe responder por la muerte de más de 800 manifestantes. En un primer juicio el año pasado, el ex mandatario fue condenado a cadena perpetua. No obstante, la sentencia fue anulada debido a deficiencias procesales. Posteriormente, el primer juez encargado de este segundo proceso se declaró incompetente poco después de comenzar y abandonó la sala.

El proceso, que se llevó a cabo bajo estrictas medidas de seguridad, fue retransmitido por la televisión estatal. Mubarak asistió en silla de ruedas y con gafas oscuras junto con sus hijos Gamal y Alaa, el ex ministro del Interior Habib al Adli y seis altos funcionarios de ese ministerio.

Protestas e incidentes

También hoy se produjeron altercados. Los opositores a Mubarak profirieron gritos contra los defensores kuwaitíes del ex mandatario. El juez Mahmud al Rashidi los llamó al orden: “Que puedan hacer mucho ruido no significa que ustedes tengan razón”.

A continuación el magistrado se enzarzó en una pelea con los representantes de las víctimas sobre la marcha del proceso y decidió interrumpirlo tras una hora.

El ex ministro Al Adli y los seis altos cargos de Interior están acusados de haber dado la orden de disparar contra los manifestantes. Al igual que Mubarak, en el anterior juicio Al Adli fue sentenciado a cadena perpetua, pero el resto de funcionarios fueron absueltos, lo que generó muchas críticas entre la opinión pública. La gente vio el fallo como una disculpa al antiguo régimen de injusticias y abusos.

Los hijos de Mubarak Gamal y Alaa están acusados de corrupción. También se presentan cargos en rebeldía contra el empresario Hussein Salem, un millonario acusado de malversación de fondos públicos y enriquecimiento ilícito. Salem es especialmente odiado por la población por un acuerdo de gas que firmó con Israel y que fue muy lucrativo para él. Durante el levantamiento popular contra Mubarak huyó a España.