Concurren a la escuela Nº 941

Alumnos de La Guardia necesitan ropa y zapatillas

a_mg.jpg

Una mano solidaria. La escuela cuenta con un jardín de infantes, preescolar y nivel inicial; concurren niños desde los 4 hasta los 15 años. Si las “zapas” se mojan, es un motivo para no ir a clases. Foto: Mauricio Garín.

Desde la institución educativa solicitaron donaciones de ropa de invierno y, principalmente calzado del número 24 al 40.

 

De la Redacción de El Litoral

[email protected]

Antes de que las temperaturas del invierno se empiecen a notar, los alumnos de la escuela primaria Nº 941 Juan Apóstol Martínez, de La Guardia, necesitan de la solidaridad de los santafesinos. Es que el frío se siente hasta en los huesos en la costa y si a los chicos se les mojan las zapatillas, es difícil que se queden sentados en el aula con los pies húmedos.

Virginia Zulian, la directora de la institución de la avenida Depetris s/n, le contó a El Litoral que la mayoría de los 400 alumnos que recibe diariamente la escuela provienen de Colastiné, San José del Rincón y fundamentalmente, de las zonas más bajas de La Guardia conocidas como “Las vías muertas” y el bañado.

“Son de condición humilde, la mayoría de las familias subsiste con distintos planes del Estado y a veces, las zapatillas con las que vienen a la escuela son las únicas que tienen”, comentó Virginia para dar cuenta de que cuando llueve, sus alumnos deben caminar hasta un kilómetro por el barro y después “las zapatillas no sirven más”. Es por eso que en algunas oportunidades hacen el tramo desde la casa a la escuela “descalzos con los pantalones arremangados”.

Concretamente, los chicos necesitan que quien pueda acerque a la escuela calzado desde el número 24 al 40 y ropa de abrigo.

En un contexto hostil

La escuela Nº 941 es la única de nivel primario en La Guardia, cuenta con un comedor en el que almuerzan los chicos y donde sirven una copa de leche a la tarde. Por la noche, también funciona en el mismo edificio un nivel inicial para adultos. “La escuela hace todo lo que puede para contenerlos en todos los aspectos posibles”, dijo la directora sobre la población de la Juan Apóstol.

En general, los niños que concurren a la institución provienen de familias humildes, cuyos padres están desocupados o realizar changas temporales y de muy baja paga. “Lo que necesitamos es que la Municipalidad se acuerde de La Guardia. Se necesitan trabajos genuinos y no que sigan otorgando subsidios”, dijo finalmente la directora Zulian.