JERRY LEWIS EN CANNES

El rey de la comedia

El legendario actor está en el festival para presentar la película “Max Rose” donde interpreta a un viejo pianista de jazz. Entre bromas y risas, admitió estar orgulloso de su extensa carrera.

El rey de la comedia

De regreso. La actuación de Lewis en “Max Rose” supone la vuelta al cine del protagonista de tantos clásicos de la comedia tras 18 años. Foto: EFE

 

De la Redacción de El Litoral

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Con 87 años y energía desbordante, Jerry Lewis se adueñó de Cannes con humor, ironía e inteligencia. Dijo ser un “payaso loco”, aseguró que Cary Grant y Burt Reynolds eran “las” mejores humoristas que había conocido y desconcertó a todos al bromear sobre Dean Martin, su compañero en tantos filmes memorables.

“Dean Martin. Está muerto, ¿lo sabe?”, afirmó muy serio el actor ante la pregunta de un periodista por la relación entre ellos. Y ante las carcajadas de los asistentes añadió: “Cuando llegué aquí y vi que no estaba supe que algo iba mal”.

El mítico actor está en Cannes para presentar -fuera de competición y en sesión especial- la película “Max Rose”. Allí interpreta a un pianista de jazz retirado que, tras la muerte de su mujer, descubre que su idílico matrimonio de más de 60 años, no era tan perfecto como aparentaba, consignó EFE.

Lewis entró caminando con cierta dificultad en la sala de prensa donde recibió un caluroso aplauso por parte de los periodistas, ya entregados antes de empezar la intervención del cómico.

Tomó fotos con su cámara a los fotógrafos que le captaban a él, interrumpió a sus compañeros de equipo y contestó cualquier cosa cuando una pregunta no le parecía interesante o, simplemente, no la escuchaba bien.

“¿Por qué está usted gritando?”, interrumpió el actor a un periodista que hacía una pregunta, a quien pidió que bajara el tono de voz. Cuando volvió a tomar la palabra, Lewis apostilló: “habla más alto”. Y a una de las azafatas que pasaba el micrófono le preguntó: “¿Está usted esperando un sitio?”.

Entre las bromas, las risas y su evidente sordera, Lewis se perdió en algunas de las preguntas, cosa que no le importó en absoluto. Dijo muy serio por detrás a sus compañeros de filme: “estoy diciendo cualquier cosa y cree que estoy contestando a la pregunta”.

Los aplausos y las risas interrumpieron en varias ocasiones una rueda de prensa que precedió al homenaje que le dedicó Cannes a uno de los actores cómicos más importantes de la historia cuyo único Oscar es un premio humanitario.

El protagonista de “El profesor chiflado” parecía bromear hasta cuando hablaba en serio, como cuando dijo que una película que rodó en 1972, “The Day the Clown Cried” y que no se estrenó nunca, es demasiado mala para que la vea nadie.

“Es mala porque yo perdí la magia”, dijo Lewis de un proyecto del que hizo el guión y se ocupó de la dirección. “Nunca la verán”, aseguró. Pese a esa película, reconoció estar orgulloso de su larga carrera y de que el amor haya sido el ingrediente básico en todos sus proyectos.

Un papel distinto

El gran comediante está especialmente contento del papel que interpreta en “Max Rose”, alejado de cualquier cosa que haya hecho antes y que es el regreso de Lewis al cine tras 18 años de breves apariciones en series televisivas.

En esta película el realizador Daniel Noah buscaba a un actor para hacer el papel protagonista y en un primer momento pensó en Dustin Hoffman o Robert de Niro, pero quería a alguien de más edad y el papel recayó en Lewis.

Que tuvo que olvidarse de sí mismo para hacer el papel. Tuvo que alejarse de sus “valores cómicos” y centrarse en la belleza de la historia, porque el director le dijo que había demasiados elementos en él del “loco Jerry”.

“Es muy difícil para el loco payaso que he sido durante 60 años que me pidan que algo diferente”, agregó. Pero eso fue lo que hizo porque el guión era el mejor que leía en 30 años, le encantó y decidió hacerlo.

Pero entre broma y broma, tuvo tiempo también de lamentar que a la gente mayor se le ponga a un lado y no se les preste atención, de pedir que el amor siga siendo el valor que mueva todo y de sentenciar con una definición del humor. “El humor es humor. Las risas son risas. Si haces que el humor sea divertido, la gente se reirá”.