Conmoción en barrio Roma por el asesinato de una joven

Había comprado la moto para llevar sus hijitos a la escuela

La mujer asesinada ayer a la tarde era una emprendedora. Madre de tres niños y excelente vecina. Como autor del crimen se señala a un jovencito, de 17 años, detenido minutos después del suceso.

La tragedia sumió en un profundo dolor no sólo a los familiares de Analía sino a los habitantes de la tradicional barriada. Fotos: Pablo Aguirre

Danilo Chiapello

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Se llamaba Analía Mariel Morales y tenía 26 años.

Su vida estaba repleta de sueños e ilusiones los que quedaron truncos de golpe ayer a la tarde, cuando un delincuente la asesinó a puñaladas.

Analía o Ana (como le decían sus íntimos) no era una mujer de brillos innecesarios o grandilocuencias extremas. Todo lo contrario.

Quienes la conocieron la definieron como una chica de perfil bajo, casi tímida, pero con una fuerza especial para llevar adelante sus proyectos. Esa misma garra fue la que le permitió criar sin problemas a sus tres hijos varones, de 2, 4 y 7 años.

Fue por sus niños que Analía se embarcó en la compra de una motocicleta, que estaba pagando en cuotas. La joven la utilizaba para llevar a sus hijos a la escuela.

Nacida y criada en una modesta vivienda de barrio Roma supo desde muy temprano lo que significa el esfuerzo y el sacrificio.

Es por esto que a nadie le resultó extraño cuando este último tiempo se hizo un “lugarcito” en la verdulería y almacén que atiende su padre.

Desde ese rincón Analía exhibía y vendía objetos de bijouterie, como así también prendas de vestir que traía desde Buenos Aires.

Sobre esta última actividad (la venta de ropa) Analía tenía grandes expectativas. Por esta razón había comprado, con ayuda de su padre, una computadora. “Tenía pensado comunicarse con sus clientas a través de Internet”, dijo hoy el hombre.

Dolor sin fin

Desde hace 5 años Analía compartía su vida junto a Rubén, un guardiacárcel actualmente destinado en la Unidad Penal 3 de Rosario.

“No tengo palabras para describir tanto dolor”, dijo hoy el hombre quien se encontraba acompañado por sus camaradas y amigos que llegaron hasta el velatorio.

“En un segundo destruyeron toda una familia. Ahora tengo que sacar fuerzas para poder seguir”, confió entre lágrimas.

La hermana

* Mónica Morales, una de las hermanas de Analía.

“Yo dormía en el cuarto que da al patio cuando siento los gritos de mis hijas y salgo a la calle. Ella ya estaba inconsciente en el piso. Acá vivíamos las dos con nuestras familias. Si se trató de resistir? Aparentemente sí, pero no vimos nada... sólo escuchamos algo extraño, cuando salimos ya todo había pasado.

Ana estaba estudiando instructorado de ritmo latino; se había comprado la moto hace cuatro meses. Vendía ropa, era una chica muy alegre, con muchas ‘pilas’, con muchos proyectos, muchas ganas de luchar. Amaba a sus hijos y a su familia, era una chica excelente. Estamos destrozados...

A las autoridades les digo que se pongan en el lugar de nosotros... que entiendan la pérdida que tuvimos... ahora cómo hacemos para decirles a esas criaturas... son tres criaturas que quedan sin la madre... cómo hacemos...

Todos trabajamos, estudiamos, nos esforzamos para tener las cosas bien y estos pibes siempre hacen lo mismo. No hay derecho. Es algo terrible, pero bueno.... vamos a seguir adelante por los chicos y por mis padres, que están grandes. Yo también estoy sola con mis hijos.

Somos cuatro hermanos y ella era la menor. Los otros dos son hombres.

Sabemos que es un menor que estaba con un pegamento, con ‘poxi’, y enseguida declaró que él la había matado cuando lo encontraron.

Mis hijas escucharon movimientos raros y le estaban queriendo robar... cuando salimos el tipo ya estaba doblando en la esquina y mi hermana estaba tirada en el piso, inconsciente. Imagino que se resistió a entregarle la moto y por eso la apuñalaron.

“Había comprado la moto fundamentalmente para llevar a los chicos a la escuela”, culminó

“Me ayudaba siempre”

* Roberto, el papá de la víctima.

“Nosotros somos gente del barrio de toda la vida. Analía armaba bijouterie y vendía ropa, era como para tener algo más. Ella trabajaba siempre. Por ejemplo, se iba a Buenos Aires desde donde traía ropa que luego vendía.

Ahora se había comprado una computadora porque tenía la idea de ampliar su negocio. Quería visitar a sus clientas por Internet.

La estaba pagando en cuotas.

Lo peor de todo es que tiene tres chicos, de 2, 4 y 7 años

Los días de ella eran muy tranquilos pero con mucha actividad. Ella me ayudaba en mi negocio, yo tengo una verdulería y almacén. Al costado, ella se había hecho un panel donde vendía las cositas de ella.

A la mañana temprano llevaba los chicos a la escuela. Los llevaba y los traía todos los días. Se había comprado la moto para eso. Primero llevaba dos y luego al tercero”, dijo.

Rafael Grau

“Nada nos sorprende”

• El jefe de la Unidad Regional I, Rafael Grau, aseguró en declaraciones periodísticas esta mañana que “ya no sorprende nada”, de lo que tiene que ver con la participación de menores de edad en delitos violentos.

El apresado por el crimen de Analía estaba muy exaltado cuando fue capturado. “Los agentes dicen que estaba incontrolable -señaló-. Cada vez son más los casos de jovencitos que presentan ese estado. Es algo que nos genera una preocupación terrible”.

“Es un problema que refleja una realidad social. En lo que va del año detuvimos a 450 menores, de los cuales 100 son reincidentes. Todo comienza en un hurto y termina en episodios trágicos como éste. Además, otros 600 menores han sido trasladados a sedes policiales para resguardar su integridad, por ser hallados en lugares y en horarios peligrosos”, puntualizó.

El dato

Habría confesado

• El único detenido por el crimen de Analía es un menor de 17 años, que fue interceptado minutos después en la vía pública por una patrulla del Comando Radioeléctrico.

Según trascendió, el muchacho estaba bajo los efectos de algún estupefaciente cuando fue sorprendido por la policía. Aparentemente, en ese momento confesó ser el asesino.

El apresado contaría con no pocos antecedentes delictivos y sería hermano de un lamentablemente célebre barrabrava del Club Colón.

 

fotos: pablo aguirre

Armado con un cuchillo

• Pero la historia de Analía terminó trágicamente ayer.

Faltaban pocos minutos para las 15 cuando la joven salió de su casa en pasaje Magallanes al 4200 con la intención de asistir a una clase de gimnasia en el Parque Juan de Garay.Estaba subiendo a su moto cuando un delincuente la atacó por sorpresa y pretendió robarle el vehículo. La secuencia prosiguió de manera confusa y dramática.

En un momento dado, el rufián sacó a relucir un cuchillo con el que asestó dos puñaladas a la mujer; una en el pecho y la restante a la altura de la sien.

Concretado el demencial acto, su autor se dio a la fuga, en tanto Analía quedaba tendida en el suelo ya herida de muerte.

Fueron dos agentes del Comando Radioeléctrico los que primero llegaron al lugar. Al ver la escena cargaron la mujer al patrullero y salieron raudos hacia el Hospital Cullen donde lamentablemente arribó ya sin vida.

En simultáneo otras unidades rastrillaban la jurisdicción en busca del agresor. Esta tarea dio sus frutos poco después cuando un móvil advirtió la presencia de un sospechoso a la vuelta del domicilio de Analía.

Se trató de un joven, de 17 años, que al momento de su captura llevaba en sus manos un envase con un poderoso pegamento.

Las características del apresado coinciden con las aportadas por los ocasioneles testigos del suceso, motivo por el cual la situación del arrestado sería por demás de complicada.

En la zona norte

Adolescente baleado en la espalda

• Un menor de 15 años fue baleado en la espalda esta madrugada en la zona norte de nuestra ciudad, y al cierre de nuestra edición se debatía por su vida en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Cullen.

Fuentes policiales identificaron a la víctima como Javier López, quien se domicilia en Cabaña Leiva. Según indican las primeras versiones, López caminaba con un amigo por inmediaciones de avenida Blas Parera y Callejón Aguirre, aproximadamente a las 4 de hoy. En ese momento fueron interceptados por una “patota” que habría intentado asaltarlos. En medio del incidente, un arma de fuego se accionó y el adolescente cayó malherido al suelo. El proyectil había impactado en la zona posterior izquierda de su tórax y le provocó heridas internas importantes. Un policía cargó a Javier López en su auto particular y lo trasladó velozmente al Hospital Cullen, donde el joven fue intervenido quirúrgicamente. El menor permanece internado, en grave estado, en la Unidad de Terapia Intensiva de ese centro de salud.

en imágenes

El trabajo de los peritos y de los investigadores se desarrolló en medio de la conmoción entre vecinos y familiares de la víctima .