Nueva sesión anual del Concejo Joven

La “onda” adolescente cambió el rígido protocolo del Concejo

Unos 60 alumnos de escuelas medias fueron concejales por un día. Aprobaron proyectos que serán evaluados por los ediles. La Fiesta del Alfajor Santafesino, el tema más debatido.

a_lc.jpg

Concejales por un día. Los alumnos secundarios trataron, discutieron y aprobaron 16 proyectos, que ahora serán evaluados por los ediles en comisión. Foto: Luis Cetraro

 

Luciano Andreychuk

[email protected]

Acné. Rastas. Raros peinados nuevos. Remeras de rock. Blusas multicolores. Piercings. Tipo, O sea. Obvio. No da, Sí da. Pulseras. Celulares en mano. Nerviosismo. Exabruptos involuntarios. Risitas ansiosas sobre el mic. Carteles: “Por un establecimiento propio. Esc. Nº 326, 5º C”, o “¡Industrial!”. Y muchas, muchas ganas de hablar: 60 chicos tratando de opinar, defender argumentos. “¡Silencio en la sala!”, ordenaba imperativamente el “presidente” del Cuerpo, un pibe de no más de 17. Era difícil.

Ésa era la estética informal, la semiología y los usos del habla de la juventud que colmaron el recinto del Concejo e hicieron olvidar por un rato las rígidas rutinas deliberativas. Las propuestas discutidas, más que interesantes: es cierto que la juventud no es un atributo en sí mismo, pero quien la subestime -bajo prejuicio de ignorancia o inexperiencia- se verá en un craso error: hubo propuestas ambientales, educativas, culturales, varias novedosas y originales.

Ayer se realizó una nueva edición de Concejo Joven, donde participaron cerca de 60 estudiantes elegidos como representantes de 13 escuelas públicas y privadas de distintos barrios. En el rol de concejales, los alumnos aprobaron 16 proyectos legislativos propios. Esos proyectos pasarán a comisión y serán evaluados por los ediles de la ciudad. Se seleccionarán los más viables y, luego, serán tratados en sesión ordinaria. El año pasado, los jóvenes aprobaron 28 proyectos, de los cuales 4 se convirtieron en normas locales.

Temas

En las bancas, había dos o tres representantes por cada escuela. En las barras, compañeros, algunos docentes y padres que aplaudían la aprobación de cada proyecto. Colgaban desde arriba carteles identificatorios, coloridos y simpáticos, propios de ese frenesí adolescente que ya en la vida adulta se vuelve un grato aunque lejano recuerdo.

Hubo proyectos interesantes. Por ejemplo, una propuesta para colocar rincones ecológicos en los supermercados y contenedores en la vía pública para favorecer la recolección de basura inorgánica; otra para evaluar la posibilidad de parquizar un basural a cielo abierto en Yapeyú Oeste; la creación de un sistema de señalización digital turística, o un abordaje integral de la problemática del bullying escolar.

Otros: la creación de un centro de mediación comunitaria para atender conflictos; separación de residuos y generación de biogás en Alto Verde; acciones de concientización sobre el consumo de alcohol y la conducción de automóviles, promoviendo la figura del Conductor Designado, etc.

Día del Alfajor

El tema más debatido fue un proyecto para decretar el Día y la Fiesta del Alfajor Santafesino. “El alfajor es un símbolo identitario. Puede servir para difundir el turismo y nuestra cultura”, defendió uno de los chicos. “¿Pero en la fiesta habrá sólo grupos de cumbia, o también de rock y de reggae? ¿Serán locales o foráneos?”, cuestionaron algunos. ¿Cómo se promocionará el evento?” preguntaron otros. Más allá de las dudas, el proyecto se aprobó y ganó ruidosos aplausos.

Para el presidente del Concejo, Leonardo Simoniello, “el Concejo Joven funcionó bien, previos talleres de formación. Los proyectos fueron muy buenos. Los chicos, más allá de que pertenezcan a escuelas y barrios distintos, tienen temas en común con los que se sienten identificados”, resumió a El Litoral.

Un lugar para los conflictos

  • Junto a otros compañeros, Sofía de Césaris (18), del 6º año de la Escuela Industrial Superior (EIS), presentó un proyecto para la creación de centros de asistencia dedicados a atender y resolver conflictos psicosociales. Propuso abrir un centro en cada distrito de la ciudad, donde cualquier ciudadano pueda pedir ayuda en casos de conflictos personales o familiares -como violencia o maltrato-. En los centros habría pasantes universitarios de carreras como Psicología, por ejemplo.

“Los que participamos aquí realmente estamos interesados en la democracia; en llevar adelante los proyectos que más les sirvan a la sociedad. Nos interesa cambiar desde nuestro lugar de jóvenes la ciudad para mejor. Los chicos que participan de esta sesión realmente quieren a la ciudad. La quieren defender”, destacó.

También resaltó el hecho de que en el Concejo Joven participen escuelas de todos los puntos cardinales de la ciudad. “Eso nos da una perspectiva ampliada de los problemas que hay en cada sector urbano, desde el centro al norte”.

b.jpg

Sofía de Césaris, participante del Concejo Joven.

El dato

Colegios

Las 13 escuelas públicas y privadas participantes fueron La Salle, Industrial, Mons. Macagno, Juana del Pino, Cristo Obrero Industrial, Alfonso Grilli, Nicolás Avellaneda, Alte. Brown, San Agustín, Domingo Silva, José Hernández, San Eugenio de Mazenod y Patriarca de la Federación. El Concejo Joven se da en el marco del Programa de Convivencia Ciudadana.