Proyecto en debate

Presupuesto: cómo impactarán los incrementos y cambios impositivos

  • Las cerealeras deberán pagar por el Impuesto Verde unos 3 millones de pesos anuales. Por las subas en Sellos se encarecerán trámites habituales, como la obtención de partidas de nacimiento. En Inmobiliario, se piensa en aumentos graduales que llegarían hasta 2018.
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“En el caso de la industria, preferimos dar el debate sobre la mejora en el proceso productivo sin gravar directamente la venta que hace”, dijo Sergio Beccari. Foto: Archivo El Litoral

 

Ivana Fux

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El subsecretario de Ingresos Públicos, Sergio Beccari, explicó en diálogo con El Litoral, de qué manera impactará el presupuesto -si se aprueba tal como fue enviado a la Legislatura- en la estructura tributaria provincial.

—¿De qué se trata el nuevo Impuesto Verde o Ecológico?

—Intentamos gravar el proceso productivo de las industrias y de aquellos servicios como el acopio de cereales que generan daño ambiental, a través de la determinación de los niveles permitidos de esa contaminación. Se grava con un impuesto que mejora el proceso productivo y se invierte en esa mejora. Se contempla la materia medioambiental, que ninguna provincia la ha gravado. Y por encima de esos niveles permitidos, la Secretaría de Medio Ambiente aplica una multa en función de una normativa que se transgrede.

—¿De cuánto sería esa multa, aproximadamente?

—Ese tipo de multas están graduadas en el litro de combustible; de 300 a tres mil litros. Una multa normal que se estuvo aplicando estaba en el orden de los 50 mil pesos por transgredir los valores permitidos de daño ambiental. En cuanto al impuesto, el valor va a salir de la aplicación de una fórmula que va a tener en cuenta la localización de la industria, la envergadura del emprendimiento, los niveles de ruido o de impacto ambiental vía peligro de incendio o de explosión, más la capacidad de procesamiento del cereal con una fórmula que va a determinar el monto a pagar.

—Entonces, ¿habrá un impuesto que se pagará sistemáticamente y, eventualmente, una multa?

—Sí; a partir de los niveles permitidos que tiene hoy todo tipo de industria -que a decir de un ambientalista generan una “externalidad negativa” que perjudica al medio ambiente donde está instalada y se desarrolla-, va a haber un impuesto. Cuando esos niveles están por encima de lo permitido se pena con una multa.

—¿Y de cuánto será, entonces, el valor del impuesto?

—Las empresas de servicios de acopio, que tienen en la suma de factores un mayor nivel de daño ambiental, pagarían unos tres millones de pesos anuales. Pusimos un piso por debajo del cual estarían exceptuados de pagar el impuesto. El sistema que estamos utilizando implica que de un universo de 20 mil industrias, estén gravadas sólo 82. Al establecer un piso o un techo de un impuesto determinado de cien mil pesos que por debajo del cual no pagaría ninguna, estamos incentivando al espectro industrial para que comience a mejorar su proceso productivo con niveles de calidad en el control ambiental.

—¿Otras empresas pueden estar incluidas más adelante?

—En esto, utilizamos el principio de gradualidad, empezando por aquellos sectores que tienen mayor posibilidad de generar cumplimiento de normativa medioambientales que la pequeña o mediana industria, que necesita un proceso para que se vaya adecuando.

—¿De qué se trata el Instituto de Mera Compra, que también se propone crear?

—La producción primaria incluye no sólo el cereal, sino productos forestales, la frutilla o la zanahoria. Quien viene de otra jurisdicción a comprar esos productos y después los vende en su mismo Estado o los industrializa en otra jurisdicción, actualmente paga Ingresos Brutos en la jurisdicción donde los vende. La institución de lo que se llama Mera Compra implica que estará obligado a asignar una porción de base imponible (alrededor del 50%) a la provincia productora, es decir, a Santa Fe. Luego se le aplica una alícuota que sería del 1% como lo tienen ya otras provincias, con lo cual agregamos base imponible; no hay aumento de Ingresos Brutos porque el productor local no paga nada, sino que la responsabilidad recae en el comprador de extraña jurisdicción.

—¿En qué consiste el sistema de pago simplificado, que también se incluye?

—Es un sistema muy beneficioso para el pequeño contribuyente de Ingresos Brutos que hoy tiene que realizar trámites manuales para pagar. Lo que proponemos es una inscripción en la página web de la API, definiendo en qué categoría se encuentra (se establecerán categorías similares al monotributo nacional con una escala inicial de 48 mil pesos anuales y una superior de 400 mil) y pagando un importe fijo mensual que se inicia con 75 pesos. Con ese solo trámite, va al banco y todos los meses paga lo mismo. Tampoco acá estamos hablando de aumento de impuestos; incluso, cuando el contribuyente de Ingresos Brutos no llega a los niveles de venta y tiene que aplicar un mínimo, en el caso de la opción del régimen de monotributo, se va a ver beneficiado por una disminución del importe que tendría que pagar con el régimen general. De todos modos, será un sistema opcional.

—¿Los aumentos en Inmobiliario se reiterarán en los próximos años?

—Lo que planteamos tiene que ver con lo que ya habíamos sugerido en la reforma tributaria y los legisladores no nos lo concedieron. Se trata de un sistema de actualización tributaria desde el 2012 al 2018 de todo lo que es el espectro de Inmobiliario Urbano y Rural. Lo que estamos haciendo ahora es una actualización simple, lineal en función de las categorías y progresiva, sin tocar alícuotas ni valuación fiscal. Se trata de llevar a valores más razonables los mínimos (120 el Urbano y 250 el Rural) y un aumento de entre 22 y 28% para el resto de las categorías.

—Si es una progresión, ¿ello significa que en los próximos años también vamos a tener estos incrementos?

—Sí, vamos a seguir insistiendo con el concepto de la actualización progresiva de un patrimonio que como vimos, sigue estando por debajo de los valores de los años 93 a 2000.

—Se insiste en corregir el desfase del Inmobiliario, ¿no piensan insistir con la idea original del gobierno de gravar a la industria con Ingresos Brutos?

—Estudiamos cada uno de los componentes tanto de Ingresos Brutos como de Inmobiliario, más otro tipo de tributación. En este tipo de debates, hoy preferimos (en el caso del Inmobiliario Rural) dar el debate sobre los valores fiscales de la tierra y generar un mayor incremento de esos valores sin gravar la actividad con Ingresos Brutos. En el caso de la industria, preferimos dar el debate sobre la mejora en el proceso productivo sin gravar directamente la venta que hace esa industria.

 
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"vamos a seguir insistiendo con el concepto de la actualización progresiva"

Sellos

Los aumentos establecidos para el Impuesto de Sellos repercutirán -si el presupuesto se aprueba- en el costo de trámites habituales y sencillos como la obtención de las partidas de nacimiento.

“Sellos tiene dos conceptos de recaudación -recordó Beccari-: uno, lo que se llama por módulo tributario. Por ejemplo, las partidas de nacimiento son 80 módulos tributarios o la inscripción de matrimonio, alrededor de 300. El otro componente es un porcentaje; hoy, la alícuota general en la provincia es del uno por mil; cuando uno realiza un contrato o cualquier trámite vía banco, se le cobra el uno por mil del importe que va a sellar. Esto último no se toca -aclaró el funcionario-; sigue con los valores existentes. Sí vamos a insistir en una serie de trámites menores que tienen valores muy insignificantes y que queremos actualizar”. El módulo tributario ascenderá de diez a veinte centavos.