Zelaya se niega a reconocer la derrota

Hernández sería el próximo presidente de Honduras

Hernández sería el próximo presidente de Honduras

Juan Orlando Hernández baila con su esposa Ana, para celebrar en un hotel de Tegucigalpa su liderazgo en las elecciones generales. Foto: Agencia EFE

 

Redacción de El Litoral

Agencias EFE/DPA

El candidato oficialista del partido Nacional, Juan Orlando Hernández, consolidó su ventaja en el conteo electoral al mantener una ventaja de siete por ciento sobre su rival izquierdista Xiomara Castro del partido Libertad y Refundación, según confirmó el Tribunal Supremo Electoral (TSE) al contabilizar el 43 por ciento de los votos escrutados.

El presidente del TSE, David Matamoros, dijo que el 34,15 por ciento de los votos escrutados fueron a dar a Hernández, equivalente a 437.254 sufragios, mientras que Castro logró un 28,45 por ciento, que se traducen en 364.023 votos. Por su lado el opositor de derecha Mauricio Villeda del partido Liberal recibió el 21 por ciento. En tanto el Partido Anti Corrupción (PAC) alcanza el 15,74 por ciento de los sufragios.

Otros cuatro candidatos menores recibieron menos de cinco por ciento de los sufragios en forma conjunta. Matamoros pidió a los responsables de las mesas que envíen lo más rápido las actas para poder cerrar la elección presidencial.

Piden prudencia

Hernández se proclamó ganador de los comicios presidenciales e indicó que comienza una nueva era para solventar los problemas del país.

El virtual ganador de los comicios dijo que espera dialogar con su rival Xiomara Castro en los próximos días, igual que con Mauricio Villeda y Salvador Nasralla, los candidatos que recibieron más sufragios, a fin de lograr un acuerdo nacional y la reconciliación.

Hernández dijo que Honduras debe evitar volver a la división que vivió en los últimos cuatro años, cuando se derrocó al entonces presidente Manuel Zelaya, esposo de Castro, y que se debe trabajar en forma unida.

El probable ganador de los comicios dijo que recibió llamadas de felicitaciones de los presidentes Ricardo Martinello de Panamá y Juan Manuel Santos de Colombia.

Pero sus rivales Castro, Villeda y Nasralla no aceptan los resultados electorales y ellos mismos se proclaman ganadores.

Castro dijo que en su encuesta ella va en la delantera, mientras el jefe de campaña de Villeda, Benjamín Bográn, afirmó que ellos aventajan por un punto.

Nasralla dijo que todavía no puede reconocer a Hernández como ganador, ya que faltan muchas actas por contar y existen irregularidades.

Las principales cadenas radiales y noticiosas de Honduras habían proyectado previamente como ganador a Hernández en base a encuestas de boca de urna.

Previamente el jefe de la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), Enrique Correa, había pedido a los candidatos no declararse ganadores y que esperaran y acataran los resultados del tribunal electoral.

Igual posición asumió la misión de observación electoral de las Naciones Unidas, que pidió la noche del domingo esperar los resultados finales del TSE para declararse ganadores de los comicios.

La ley electoral le otorga al TSE hasta 30 días para hacer la declaratoria oficial del ganador de los comicios generales.

Ayer los hondureños acudieron a las urnas para elegir un nuevo presidente, renovar las 128 bancas del parlamento y los 298 gobiernos municipales. Los comicios transcurrieron con normalidad y la asistencia fue masiva.

El ganador de los comicios sucederá al presidente Porfirio Lobo Sosa y deberá asumir su mandato de cuatro años el 27 de enero del 2014.

El gobierno activó, a partir del día de ayer, un plan de seguridad con más de 20.000 efectivos, militares y policiales, para asegurar el desarrollo normal de las elecciones, así como el conteo de los votos y su traslado para las bodegas electorales del TSE.

Los comicios fueron vigilados por más de 80 observadores y acompañantes internaciones, encabezados por la OEA y la Unión Europea, además de organizaciones civiles, así como unos 20.000 observadores nacionales.

En total estaban convocados a las urnas unos 5,3 millones de electores y fueron habilitados 16.100 urnas receptoras de votos.